El repunte del precio de la electricidad y los combustibles por la invasión de Rusia en Ucrania ha motivado que en el sector industrial español se empiece a recurrir a paradas en su producción.
Cuando se cumplen dos semanas desde el inicio de la invasión rusa, el precio de la electricidad alcanza casi 473 euros (unos US$ 524) el megavatio hora (MWh), el segundo más alto de la historia en España.
De hecho, el precio de la luz multiplica por más de ocho el de hace justo un año (56.88 euros), y se ha más que duplicado (un 131% más) desde que el pasado 24 de febrero comenzó la invasión rusa de Ucrania.
Empresas como la multinacional Acerinox, uno de los mayores productores de acero del mundo, han comenzado a cesar la actividad, en su caso en la fábrica de Los Barrios (sur), con unos 1,800 empleados, ante el coste de la energía y el aumento del precio del níquel también por la guerra en Ucrania.
El níquel, que es imprescindible para su producción y su principal exportador es ruso, alcanzó este pasado martes los US$ 100,000 por tonelada en la Bolsa de Metales de Londres, más del doble de su precio en un solo día.
ArcelorMittal, una de las mayores siderúrgicas en el mundo, anunció la parada de su producción en Sestao, donde tiene unos 220 trabajadores, después de que otra de sus fábricas en el norte de España, la de Olaberria, también tuvo que parar este martes durante 17 horas para evitar “producir a pérdidas” debido a un precio de la electricidad “insostenible”.
La química Ercros realiza igualmente “ajustes temporales de producción” para poder adaptar la actividad a los precios de la energía, confirmaron fuentes de la compañía, que aseguran que es una medida que está tomando estos días todo el sector químico español.