Varias organizaciones civiles aplaudieron las iniciativas anunciadas hoy, pero también dejaron claro que hacen falta más detalles y más inversiones. (Foto: zillow.com | Referencial)
Varias organizaciones civiles aplaudieron las iniciativas anunciadas hoy, pero también dejaron claro que hacen falta más detalles y más inversiones. (Foto: zillow.com | Referencial)

El alcalde de , Eric Adams, presentó un ambicioso plan para tratar de atajar la crisis de vivienda que vive la ciudad, donde los precios de propiedades y alquileres no dejan de subir y donde decenas de miles de personas no tienen hogar.

“Una vivienda segura, estable y asequible no puede ser un privilegio”, subrayó Adams al dar a conocer la iniciativa, elaborada tras un proceso de consultas con organizaciones comunitarias, sintecho y la industria inmobiliaria.

El plan promete abaratar pisos en propiedad y en alquiler, mejorar el servicio de vivienda pública de la ciudad -con diferencia el mayor de Estados Unidos- y ayudar a las personas sin hogar a encontrar y mantener un lugar decente en que vivir.

Entre otras cosas, plantea nuevos incentivos para construir viviendas, en especial apartamentos más baratos; medidas para proteger las opciones asequibles que hay actualmente y ampliar los programas que ayudan a algunos neoyorquinos a comprar casa.

En el caso de la agencia de vivienda pública, que da hogar a casi medio millón de personas de las algo más de ocho millones que viven en la ciudad , Adams propone mejoras a corto plazo para dar respuesta a los problemas que sufren muchos de los edificios, antiguos y mal conservados.

Para afrontar el problema de los sintecho, el alcalde demócrata propone invertir en el sistema de albergues, dar más apoyo a esas personas para que encuentren alojamiento definitivo y reducir la burocracia en el acceso a ayudas.

Según datos oficiales, en marzo de este año cada noche estuvieron en albergues municipales más de 48,000 personas sin hogar y se calcula que varios miles más duermen en la calle, una situación que se ha hecho especialmente visible desde el estallido de la pandemia.

De hecho, desde que Adams llegó al poder en enero, se han hecho más habituales los desmantelamientos de campamentos de sintecho y las redadas contra personas que duermen en el metro.

Varias organizaciones civiles aplaudieron las iniciativas anunciadas hoy, pero también dejaron claro que hacen falta más detalles y más inversiones.

“Si bien el plan del alcalde Adams tiene algunos objetivos loables, para abordar muchos de los problemas que enfrentan los neoyorquinos sin hogar, se necesita más acción e inversión para reducir de verdad la falta de vivienda”, señaló en un comunicado la Coalición para los Sin Hogar.

La crisis de vivienda comenzó en Nueva York hace décadas, con una población que crecía a un ritmo muy superior al de la construcción residencial y se ha agravado en los últimos años, con los precios en máximos históricos.

En una ciudad donde mucha más gente vive de alquiler que en propiedad, el Ayuntamiento calcula que más de la mitad de los inquilinos gasta un 30% o más de sus ingresos en la renta, mientras que un tercio dedica a ella más de la mitad.

Tras un frenazo al inicio de la pandemia, los precios de los alquileres han vuelto a subir con fuerza y en mayo la nueva renta promedio en Manhattan, el distrito central de la ciudad, se situó por primera vez en US$ 4,000 mensuales.

“Yo quiero volver a poner el sueño de comprar una vivienda al alcance de la gente trabajadora”, subrayó hoy Adams, que lamentó que muchos residentes, en especial de minorías étnicas, se vean obligados a dejar la ciudad por los altos precios.

“Hemos diezmado la clase media y tenemos que centrar nuestra atención en estabilizar a estas familias y estabilizar la ciudad que ellos han hecho prosperar”, insistió el alcalde.