Un examen usado por las universidades estadounidenses para admitir estudiantes ya no será con papel y lápiz, sino en formato digital, anunciaron autoridades el martes.
La digitalización de las pruebas SAT —que miden aptitudes en lectura, escritura y matemática— las hará más relevantes, dijeron los organizadores, ya que cada vez más universidades están haciéndolas opcionales.
Los alumnos podrán ahora usar sus propias laptops o tabletas para realizar el examen digital, tendrán que ir a una universidad o sitio supervisado para realizarlo, es decir, no podrán hacerlo en su casa.
Se prevé que el cambio empezará el próximo año a nivel internacional y a partir del 2024 en Estados Unidos. El nuevo formato, además, reducirá en una hora el tiempo que toma la prueba, es decir, tardará dos horas en vez de tres.
“El SAT digital será más fácil de realizar, más fácil de impartir y más relevante”, declaró Priscilla Rodriguez, vicepresidenta de pruebas académicas del College Board, la entidad basada en la ciudad de Nueva York que administra las pruebas SAT y PSAT.
“No estamos simplemente colocando al SAT actual en una plataforma digital. Estamos aprovechando todas las posibilidades que nos ofrece realizar un examen por la vía digital”, añadió.
El SAT, y su rival ACT, eran antes esenciales para entrar a una universidad, pero tienen menos peso hoy en día, pues las universidades tienden a tomar en cuenta otros factores, como actividades extracurriculares y logros fuera de la escuela.
Debido a denuncias en Estados Unidos de que las pruebas favorecen a alumnos de raza blanca y de altos ingresos, en perjuicio de los de minorías étnicas o de bajos ingresos, un creciente número de universidades en años recientes han hecho la prueba opcional, o dejan que cada estudiante decida si incluir su nota en su aplicación.
La pandemia aceleró esa tendencia, ya que las sesiones para aplicar la prueba se tuvieron que cancelar.