El Banco Popular de China (BPC, el banco central chino) mantuvo este lunes intactos sus tipos de interés de referencia, desmarcándose así de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos , que la semana pasada efectuó su mayor subida de tipos en 28 años.
La tasa referencial para créditos (LPR, por sus siglas en inglés) a un año siguió situándose en 3.7% por quinto mes consecutivo, después de haber registrado su última variación en enero de este año, cuando el banco central la recortó desde 3.8%.
Por su parte, la LPR a cinco años, que muchos bancos utilizan como referencia para marcar los precios de sus préstamos hipotecarios, se mantuvo en 4.45%.
Este último indicador experimentó en mayo su mayor bajada desde su debut en agosto del 2019 con un descenso de 15 puntos básicos, el triple de lo esperado por los analistas, algunos de los cuales lo interpretaron como una señal de cierto apoyo renovado al sector inmobiliario, debilitado desde finales de verano del año pasado.
Para esta última actualización de junio, los expertos pronosticaban que el BPC iba a preferir quedarse sin mover ficha, incluso después de que en el mes anterior el banco central no cumpliera con las previsiones de rebajar también, en cinco puntos básicos, la LPR a un año.
Las LPR, establecidas como referencia de los tipos de interés desde el 2019, se calculan a partir de las contribuciones a los precios de una serie de bancos -incluyendo pequeños prestamistas que tienden a tener mayores costes de financiación y mayor exposición a créditos morosos-, y tiene por objetivo rebajar los costes del endeudamiento y apoyar a la “economía real”.
Precisamente por ello, algunos expertos apostaban recientemente por una bajada de tipos como parte de las medidas de apoyo tras el frenazo que supusieron draconianos confinamientos como el de Shanghái o duras restricciones aplicadas en diversas partes del país para tratar de atajar el peor rebrote de COVID en dos años, provocado por la contagiosa variante ómicron.
Sin embargo, tras un abril nefasto, las cifras oficiales de la economía china moderaron su sangría en mayo, cuando el Gobierno anunció un nuevo plan de impulso para la economía, aunque sin renunciar a la política de ‘COVIDcero’.
China no sigue a la Fed... Ni a Hong Kong
La decisión del banco central chino de no efectuar cambios en los tipos de interés de referencia parecía clara desde el miércoles de la semana pasada, cuando mantuvo en 2.85% las tasas de sus servicios de préstamo a medio plazo (MLF), su principal herramienta para financiar a los bancos y guía para las LPR.
El pasado 15 de junio, el BPC efectuó una inyección de 200,000 millones de yuanes (US$ 29,839 millones, 28,378 millones de euros) al sistema bancario a través de operaciones de MLF a un año con la citada tasa.
Así pues, y pese a que este 2.85% ya era la cota más baja a la que se han efectuado históricamente las operaciones de este tipo, China pareció confirmar sus reticencias a una flexibilización más agresiva, especialmente en un momento en el que las divergencias con la Fed podrían afectar al valor del renminbi (el yuan, la divisa nacional).
Quien sí siguió los pasos de la Fed fue la Autoridad Monetaria de Hong Kong (HKMA), el banco central ‘de facto’ de la antigua colonia británica, que pertenece a China pero mantiene autonomía en áreas como el control de fronteras o, precisamente, la política monetaria.
La HKMA anunció el pasado jueves una subida de tipos idéntica a la de la Fed, de 75 puntos básicos, hasta 2%.
Desde la vinculación del dólar hongkonés al dólar estadounidense en 1983, la institución ha seguido los pasos de la Fed, situando sus tipos de interés 50 puntos básicos por encima de la parte baja de la horquilla en los que la sitúe el banco central del país norteamericano o según la tasa local de préstamos interbancarios de referencia, el Hibor, escogiendo siempre la más alta de estas dos opciones.
Por tanto, con la Fed situando su horquilla entre 1.5% y 1.75% y el Hibor en 0.2%, la Autoridad Monetaria elevó desde 1.25% a 2% su tipo referencial.
El diario local South China Morning Post explicó que los tipos en Hong Kong subirán hasta en torno a 4% si la Fed sigue su plan de ir subiendo sus tasas hasta 3.75% hacia finales del 2023.