Los ajustes a la calificación crediticia del Perú continúan. Ahora, la agencia de calificación crediticia internacional Moody’s rebajó de estable a negativa la perspectiva de la calificación de Baa1 de Perú, para emisión de deuda en moneda extranjera
De esta manera, Moody’s se convierte en la tercera calificadora en rebajar la perspectiva de la calificación, es decir, se incrementa la posibilidad de que la nota de Perú se reduzca en los próximos meses.
Lea también: Moody’s rebaja perspectiva de calificación de Perú por riesgos políticos y sociales
Ya en octubre del año pasado, Fitch Ratings rebajó su perspectiva de la calificación a negativa, mientras que dos meses después, en diciembre, hizo lo propio Standard & Poor’s.
Previamente, entre setiembre del 2021 y marzo del 2022, las tres agencias internacionales habían bajado la calificación de Perú (ver tabla).
Mayores riesgos
Según Moody’s, el cambio de perspectiva a negativa desde estable refleja su opinión de que los riesgos sociales y políticos se han intensificado en el Perú.
Esta situación amenaza, en los próximos años, con un deterioro de la cohesión institucional, la gobernabilidad, la efectividad de las políticas y la fortaleza económica a través de los sucesivos gobiernos.
“Se está enfrentando este reto que tienen las instituciones y no sabemos si es que van a salir ilesas de todo este tumulto social”, afirmó a Gestión el vicepresidente de Riesgo Soberano de Moody’s, Jaime Reusche.
Entre las preocupaciones puntuales, Reusche señala a la asamblea constituyente, que tiene un alto potencial de lograr un resultado inferior al que tiene el país en la actualidad.
Otro riesgo es el debilitamiento institucional propiamente dicho, sobre todo del Poder Ejecutivo y el Legislativo. “Por más que haya elecciones, el Poder Ejecutivo y Legislativo puede que enfrenten otra vez el reto que la población los rechace”, añadió.
Pese a estas preocupaciones, Reusche considera que existe la posibilidad de revertir el daño institucional del país, por lo que no se tocó la calificación de Baa1 y solo se rebajó la perspectiva.
Lo que está sosteniendo esta calificación es la fortaleza fiscal, la credibilidad de la política económica y la prudencia en el manejo de los recursos.
LEA TAMBIÉN: Fitch Ratings: algunos inversionistas salen de sectores eléctrico y gas
Calificación en observación
Esta rebaja de la perspectiva de la calificación peruana, hace que Moody’s se tome un plazo de entre 12 y 18 meses para analizar si es necesaria una rebaja de la nota actual.
La revisión podría hacerse en cualquier momento, durante ese periodo, y dependerá de cómo se vaya resolviendo el conflicto político y social en el país.
“Si se ve afectada de manera permanente la gobernabilidad del país, no descartamos la posibilidad de rebajar la calificación”, dijo Reusche.
Impacto limitado, por ahora
Para el exministro de Economía y Finanzas, Miguel Castilla, si bien la reducción de las perspectivas de las calificadoras internacionales es una alerta de la importancia que tienen el factor político y social sobre la calificación, tales decisiones tendrían un impacto limitado.
“No hay una afectación real de que esto vaya a redundar en un encarecimiento del crédito (para el país). Esto es una alerta de la importancia de estos factores que ponen al Perú en una casilla de riesgo mayor a la que teníamos antes”, explicó.
El economista sostuvo que ahora hay una visión uniforme de que hay fundamentos macroeconómicos sólidos en el Perú, pero que estamos en una gran incertidumbre respecto del modelo económico y la gobernabilidad, que puede acabar con un bajo crecimiento económico y, en el largo plazo, minar la capacidad de pago del país.
LEA TAMBIÉN: Clima de incertidumbre política ensombrece la economía del Perú