La reacción de Wall Street al índice de precios al consumidor del martes muestra que los inversionistas se están dando cuenta de que es probable que la inflación se mantenga más alta que la meta de la Reserva Federal por más tiempo. Dos voces reconocidas del mercado dicen que el objetivo del 2% es parte del problema.
“Deberían haber dicho 3% en lugar de 2%”, explicó Kenneth Rogoff, profesor de la Universidad de Harvard y execonomista de la Fed, a Bloomberg Television el martes. “Si la cambian, significa que podrían cambiarla de nuevo. Permitir que la inflación suba durante más tiempo, pero decir que va a volver al 2%, solo toma más tiempo. Esa será la retórica”.
Las acciones oscilaban el martes después de que los datos mostraran que el IPC fue del 6.4% en enero respecto al año anterior, aún muy por encima de la meta de la Fed a pesar de meses de aumentos de las tasas de interés. Tras el informe, varias autoridades de la Fed dijeron que el banco central podría necesitar seguir haciendo ajustes para garantizar que la inflación continúe cayendo.
Mohamed El Erian, presidente de Gramercy Funds y columnista de Bloomberg Opinion, también percibe que la Fed está atascada con una meta de inflación que será difícil de alcanzar.
“Es muy difícil cambiar una meta cuando no se ha llegado a ella durante mucho tiempo”, comentó también en Bloomberg Television el martes. “Cuando hacen eso, su credibilidad se ve aún más afectada. Si se reunieran hoy, no pensarían en una meta del 2%, sino más bien en un objetivo entre el 3% y el 4%”.
El-Erian prevé que es probable que la inflación “se estanque entre el 3% y el 4% pero la Reserva Federal sigue prometiendo 2%. Con suerte, aprenderemos a vivir con una inflación estable del 3% al 4%”.
Tanto Rogoff como El-Erian anticipan tasas más altas durante algún tiempo.
“Cuando baje la inflación, no den por sentado que las tasas de interés van a bajar tanto como estábamos acostumbrados antes de 2022″, dijo Rogoff. “La próxima década tendremos una tasa de interés real más alta que antes”. La Fed “debe analizar en dónde se ubicará la tasa de interés a largo plazo para que no tengamos inflación”.
Además, indicó Rogoff, “tasas reales más altas significarán precios de activos más bajos en general”.
Si bien El-Erian advirtió a los participantes del mercado que “mantuvieran la mente abierta” sobre los posibles resultados de la relativa fortaleza económica y el aumento de las tasas de interés, “el escenario más probable —le doy una probabilidad del 50%— es que terminemos con una inflación rígida de 3%-4%”.
El máximo del banco central para su tasa de préstamo a un día será “más alto de lo que el mercado ha descontado”, dijo El-Erian. “Nos quedaríamos allí por un tiempo”.