Los precios del cobre alcanzaron un máximo de casi 30 meses este martes ante el optimismo por las vacunas contra el COVID-19, expectativas de una demanda sólida en China y un dólar más débil.
A las 1139 GMT, el cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME) subía un 1.7% a US$ 7,302 la tonelada. Los precios del metal llegaron más temprano a US$ 7,331, un máximo desde junio de 2018, y un alza de casi 70% desde marzo.
El último informe provino de AstraZeneca, que el lunes dijo que su producto podría tener hasta un 90% de efectividad contra el coronavirus, lo que aporta una tercera vacuna que podría ser más barata de fabricar, más fácil de distribuir y más rápida de producir a gran escala que las de sus rivales.
Asimismo, la vacuna rusa Sputnik V mostró 42 días después de la primera dosis una eficacia de más del 95% y costará menos de US$ 10 la dosis, según informaron hoy en un comunicado el Centro Gamaleya y el Fondo de Inversiones Directas de Rusia (FIDR).
Las importaciones de cobre de China tuvieron un incremento interanual en octubre y la producción industrial del país creció un 6.9% en octubre con respecto al año anterior.
El dólar operaba a la baja en la sesión, lo que abarataba las materias primas para los tenedores de otras monedas.