Si bien el desabastecimiento de combustibles que se ha agudizado en los últimos días es atribuido particularmente a los problemas económicos y financieros que afronta Petroperú, el problema -según los especialistas- es también generado por el retraso del Gobierno en devolver a a esa empresa y demás productores mayoristas, los gastos incurridos por evitar alzas en los precios de los derivados.
Cabe señalar que el Ejecutivo entrega compensaciones monetarias a refinerías e importadores de derivados, a través del Fondo de Estabilización del Precio de los Combustibles (FEPC), para que estos mantengan invariables sus precios en los grifos y no se afecte a los consumidores locales.
Sin embargo, hasta mediados de este año, el FEPC acumulaba una deuda de S/1,643 millones con empresas como Petroperú, Refinería la Pampilla (de la empresa Repsol), Pluspetrol, y con importadores como la empresa Valero, entre otros.
Proyecto de ley del Ejecutivo a debate
Es por ello que este 17 de octubre, el Gobierno remitió al Congreso un proyecto de ley que aprueba disposiciones para asegurar el cumplimiento de pago de obligaciones del FEPC.
Esa iniciativa legal autoriza la incorporación de recursos vía crédito suplementario en el presupuesto del sector público para el año fiscal 2022 hasta la suma de S/1.643 millones a favor del Ministerio de Energía y Minas.
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Esos recursos, según el proyecto, provendrán de los mayores ingresos por recursos ordinarios estimados para el presente año, y permitirán financiar al fondo para que este a su vez pueda pagar a los productores e importadores.
Al respecto, el Congreso remitió el proyecto de ley a la Comisión de Presupuesto, cuyo presidente, José Luna, informó que convocará a sesión extraordinaria este viernes 28 a fin de analizar la citada iniciativa legal del Ejecutivo.
El parlamentario indicó que a la sesión ha sido citado el ministro de economía y finanzas Kurt Burneo para sustentar el mencionado proyecto de ley.
Además, indicó que la convocatoria en plena semana de representación se realiza debido a la urgencia del tema, dado que, además, el citado fondo está destinado a evitar que la fluctuación de los precios del petróleo y sus derivados se traslada a los consumidores locales.
Fondo sin saldos disponibles
Vale indicar que el proyecto de ley en mención refiere que el FEPC no cuenta en la actualidad con saldo disponibles para el pago de las obligaciones que tiene comprometidas con los productores e importadores.
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Por ello, indica, es pertinente que el MEF transfiera los recursos necesarios a fin de saldar esas obligaciones, dado que -reconoce el proyecto- estas son asumidas por las empresas productoras importadoras afectando su sostenibilidad financiera.
Al respecto, Renato Lazo, managing director de Energía ConTacto y especialista en combustibles, advirtió que, en efecto, la falta de pago por parte del FEPC, es una de las causas del desabastecimiento de derivados que ahora se ve en el mercado local.
“Esta situación afecta tanto a las compañías refinadoras como a los importadores porque finalmente lo que están haciendo ellos es financiar a la subvención que está dando el Estado (para evitar alzas en los consumidores)”, anotó.
Observó también que, si se devuelven los S/1,640 millones a los mayoristas (productores e importadores) se hará sin el pago de intereses y con un tipo de cambio más alto que cuando los mayoristas adquirieron los derivados.
“Además de eso las empresas refinadoras y los importadores tiene que haber obtenido créditos del sistema financiero para compensar los recursos no recibidos del fondo, y eso tiene un costo financiero”, apuntó.
Nuevas alzas
Por su parte, Diego Rosales, especialista en hidrocarburos, advirtió que, a raíz de la actualización de las bandas de precios del diésel, GLP y gasolinas que están en el FEPC, es previsible que el precio del diésel siga subiendo en los siguientes días.
Estimó que el precio de ese derivado podría incrementarse, desde una mediana actual de S/19.50, a S/19.70 por galón durante el mes de noviembre, y que esa situación preocupa, en un contexto en el que los transportistas de carga han anunciado una huelga indefinida en ese periodo, exigiendo se reduzca su precio a US$3,00 por galón.
Aún así, Rosales señaló que los precios del diésel en el Perú no son los más altos en comparación a otros países, debido precisamente a que están protegidos por el FEPC (ver gráfico).