El Consejo de Administración de Telecom Italia aceptó hoy la renuncia de su consejero delegado, Luigi Gubitosi, y reorganizó su dirección, en medio del análisis de la oferta de compra del fondo KKR, informó el grupo en un comunicado.
Tras una reunión de seis horas, el Consejo aceptó la salida de Gubitosi, que él mismo había presentado ante las acusaciones de que podría tener algún interés en que prospere la operación de KKR, y reorganizó la dirección del Grupo.
Así, el responsable de la controlada TIM Brasil, Pietro Labriola, será director general, tras reconocer su experiencia en el sector de las telecomunicaciones y su conocimiento en internacionalización e innovación.
El presidente, Salvatore Rossi, se hará cargo de las secciones Colaboraciones y alianzas, comunicaciones institucionales, proyectos sostenibles y promociones, asuntos públicos y gestionará los activos importantes de seguridad nacional.
Para agilizar los procesos internos de Telecom Italia en “una fase de intenso trabajo”, se designó una directora jefe independiente, Paola Sapienza.
Gubitosi, que en el pasado dirigió Alitalia y la RAI, hasta que en el 2018 fue nombrado consejero delegado y director general de TIM, seguirá como consejero, al poseer casi cuatro millones de acciones.
Esta reorganización de los mandos “garantiza de forma inmediata la plena operatividad del grupo, por el interés de todos los socios”.
Este Consejo extraordinario se celebró después de que KKR -uno de los principales accionistas de MásMóvil tras la opa lanzada en el 2020- propusiera comprar la totalidad de la empresa por unos 11,000 millones de euros, manifestación de interés no vinculante.
En este sentido Telecom Italia se ha dotado de un comité para valorar la propuesta e impulsará “próximamente toda actividad instructoras y propedéuticas para el análisis del contenido” de la operación.
“La actividad del comité será conducida con las mejores praxis para permitir al consejo valorar completamente la dimensión, el contenido, las condiciones y las consecuencias” de la oferta, así como de asumir cualquier determinación con información adecuada.
El fondo estadounidense ha ofrecido 0.505 euros por acción, un precio insuficiente para el socio principal, el grupo francés Vivendi, que tiene el 23.75% del capital de TIM y que compró sus títulos hace más de cinco años a más de un euro.
Gubitosi puso su cargo a disposición del Consejo para no obstaculizar el examen de la propuesta de interés, debido a “las acusaciones no demasiado veladas que se han hecho en relación -dijo- a mi supuesta proximidad a KKR”, que tachó de “fuera de lugar y falsas”, en una carta dirigida a los consejeros.
La oferta de KKR está condicionada a la realización de dos controles de confirmación con una duración estimada de cuatro semanas, y el fondo quiere asegurarse de tener el visto bueno del Gobierno italiano, que puede usar el llamado “golden power” o acción de oro para bloquear operaciones en empresas consideradas estratégicas.
El Gobierno de Mario Draghi, que posee un 9.81% del capital a través de la pública Cassa Depositi e Prestiti, sigue con atención la evolución de la oferta y a tal fin ha creado un grupo ministerial encabezado por el titular de Economía, Daniele Franco.
Draghi, economista de prestigio y expresidente del Banco Central Europeo, ha asegurado que las prioridades serán tres: proteger el empleo, la red de infraestructuras y su tecnología.