El fabricante de automóviles italiano Fiat Chrysler (FCA) negocia un crédito bancario de 6,300 millones de euros garantizado por el Estado italiano para ayudarle a atravesar la crisis generada por el nuevo coronavirus.
"Se han iniciado negociaciones con Intesa Sanpaolo, primer grupo bancario italiano, para una facilidad de crédito de tres años", indica un comunicado del grupo.
FCA Italia mantiene también "negociaciones con el gobierno para obtener una garantía de la SACE, la agencia italiana de crédito a la exportación", explica el texto.
El objetivo es “financiar las actividades de FCA en Italia y aportar un apoyo adicional a unas 10,000 pequeñas empresas de la cadena de suministro automovilística”.
"En virtud del decreto sobre liquidez del gobierno italiano (adoptado en abril para apoyar la economía ante la pandemia del coronavirus), el monto total del crédito puede ser equivalente al 25% del volumen de negocio consolidado de las empresas industriales de FCA en Italia, hasta 6,300 millones de euros", precisa el fabricante italoestadounidense.
Sin embargo, la sede legal del grupo italo-estadounidense FCA está situada en Holanda, y la posibilidad de que una parte de un importante crédito garantizado por las instituciones italianas vaya al extranjero suscita importantes interrogantes y críticas entre la clase política italiana.
"Una empresa que pide una importante cantidad de dinero al Estado italiano debe repatriar su sede a Italia", dijo en Twitter el vicepresidente del partido Demócrata (en el poder), Andrea Orlando.
Fiat Chrysler emplea en Italia a cerca de 55,000 personas en 16 fábricas y 26 plantas y el grupo asegura que trabaja con 5,500 contratistas en la península, que generan unos 200,000 empleos.
El sector del automóvil es clave para la economía italiana y responde por el 6.2% del PBI nacional, pero se vio fuertemente golpeado por la pandemia del coronavirus, que se ha cobrado más de 31,000 muertos en la península, el país más enlutado de Europa.