Colombia busca reducir su dependencia del petróleo y el carbón mediante el desarrollo de depósitos de cobre ante el aumento previsto en la demanda de minerales metálicos utilizados en baterías recargables.
Las autoridades comenzaron los procesos de licitación para cinco zonas de cobre en los departamentos de Córdoba y La Guajira, donde se extrae gran parte del carbón de Colombia. Los bloques de exploración probablemente se adjudicarán antes de mitad de año, con participación de pequeñas empresas estadounidenses y canadienses y otras firmas que ya operan localmente liderando las muestras de interés, dijo el ministro de Minas y Energía, Diego Mesa. Un proceso simplificado de permisos para acortar el camino hacia la producción es uno de los incentivos.
“Colombia podría convertirse en uno de los principales productores de oro y cobre”, dijo en una entrevista el jueves. “Sabemos que el cinturón de cobre comienza en Chile, continúa a través de Perú y termina en Panamá”.
Si bien la nación continuará explotando combustibles fósiles, aunque en cantidades más bajas, una tendencia mundial hacia la electrificación indica una mayor demanda de metales como cobre, níquel y oro, dijo Mesa. El precio del cobre se ha duplicado en el último año a un máximo de casi una década.
Colombia hace parte de esa transición hacia una energía más limpia, con un portafolio de proyectos de energía solar, eólica y bioenergía de hasta 7,000 megavatios.
El país iniciará una subasta de energía renovable en la segunda mitad del año y entre los posibles postores se considera a compañías como Celsia SA, Enel Green Power SpA, Isagen SA y Électricitéde France SA.
Colombia también busca promover el uso de vehículos eléctricos, una industria cuyas ventas crecieron 90% el año pasado, dijo el ministro. Se espera que venda alrededor de 10,000 vehículos híbridos y eléctricos solo este año, superando el objetivo de cuatro años de 6.600 establecido en 2018.
Ciudades como Bogotá, Medellín y Cali están dirigiendo su atención hacia la movilidad eléctrica. “El sistema de transporte masivo tendrá la mayor flota de vehículos eléctricos del mundo, con excepción de China”, dijo Mesa.
Las compañías automotrices llevarán nuevos modelos al mercado colombiano a medida que sea más competitivo. “La gente, creo, se volvió más consciente con la pandemia de su huella ambiental”, dijo.