Carlos Canales, virtual alcalde de Miraflores, busca que los vecinos de este distrito logren aumentar el valor de sus propiedades, enfocándose en promover el turismo a través de la generación de obras y de nuevos servicios. En la siguiente entrevista nos da más detalles de sus próximos planes.
¿Cuál será el objetivo de su gestión?
Buscamos que sea un modelo de gestión exitosa, y en línea con ello queremos generar plusvalía en las propiedades. Apuntamos a que el miraflorino que haya invertido en el distrito logre obtener este mayor valor por su inversión.
¿Cuánto está actualmente el metro cuadrado (m2) en Miraflores? ¿Este precio se viene manteniendo?
En las zonas de menor valor está en alrededor de los US$ 1,500; y en las de mayor, como en el malecón, llega a los US$ 12 mil. Sí, se viene manteniendo, por ello queremos empoderar al vecino, y que logre que su propiedad valga más. Para ello se busca que las zonas tengan más valor al contar con más servicios.
¿Cómo generarán esta plusvalía en las propiedades?
Especialmente queremos consolidar la oferta turística. Miraflores es un distrito absolutamente turístico, que requiere de una serie de mejoras para lograr su máximo nivel de competitividad. Si bien es cierto que llegan vecinos de todo el país y el extranjero, hay una serie de déficits de servicios en los que trabajar por el volumen de personas que lo visitan.
¿Qué obras se realizarán para solucionar este déficit?
Debemos comenzar a usar y ampliar espacios que hoy no se utilizan. Un ejemplo es buscar la integración del circuito de playas con el malecón, es decir, generar vías de acceso de la parte alta a la baja. Y en busca de esto, ya en anterior gestión, se ha adjudicado a una empresa austríaca (Grupo Doppelmayr/Garaventa) el desarrollo de un teleférico que unirá el malecón, a la altura del parque Domodossola, con la playa Redondo, que debe estar listo a mediados del 2023. Buscaremos desarrollar dos teleféricos o funiculares más.
¿Dónde se desarrollarán los otros dos proyectos?
Uno segundo irá de la playa Tres Picos al malecón y el otro de la bajada de la avenida del Ejército hacia la zona limítrofe con San Isidro. Asimismo, hay unas áreas subutilizadas en la parte de circuito del playas, donde no hay servicios, salvo el comercio ambulatorio. Pero vamos a desarrollarlos, acompañados de un gran complejo deportivo que va a estar a la altura de la bajada del Cuartel San Martín.
¿Qué otros proyectos desarrollarán en favor del turismo?
Si bien la oferta turística en el distrito es completa, hace falta un centro de convenciones que vamos a construir, que le dará mayor valor, y que elevará el gasto del visitante. Y es que este turista gasta dos o tres veces más que uno de ocio regular. Este será el primer centro de convenciones con vista al mar de América Latina. Además, generará un mayor movimiento en servicios de hoteles, restaurantes, y empresas de servicio turístico. Estimamos tenerlo listo en dos años y demandará una inversión de entre US$ 20 y US$ 25 millones.
¿Dónde se va a desarrollar?
Tenemos dos áreas en la mira. En el primer caso buscaríamos integrar el centro de convenciones con el coliseo Manuel Bonilla, y para ello se hará un mejor dimensionamiento de los espacios, reforzamiento del suelo, y adicionalmente se generará infraestructura. Y es que este coliseo está subutilizado. Y la otra zona que estamos viendo es cerca a la playa, pero requiere mirar las características y tener las respectivas autorizaciones.
¿Cómo se prevé financiar estos proyectos que plantea?
Como empresario, siempre me interesa promover la asociación público-privada, pero si nosotros sabemos vender el proyecto al Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), creo que podrían utilizarse recursos del fondo especial de promoción o del propio Plan de la Comisión Especial para Coordinar y Supervigilar el Plan Turístico Cultural Perú – Unesco (Copesco).
Desarrollo inmobiliario
¿Prevén hacer algún cambio de uso en la zonificación en el distrito?
Hay que tener en cuenta que hay varios Miraflores dentro del distrito. Vamos a respetar la residencialidad en zonas de menor densidad como San Antonio, La Aurora y urbanizaciones cercanas, pero no podemos entrar a construir edificios con departamentos de 29 m2, porque eso genera mayor densidad. Buscamos que se desarrollen departamentos de alrededor de 60 m2 tipo estudio. Se deben medir los temas de los servicios de agua y desagüe que requiere ese tipo de construcción.
¿Actualmente cuánto es el metraje mínimo para el desarrollo de departamentos en el distrito?
Dependiendo del lugar, en algunas zonas como República de Panamá se han aprobado proyectos con departamentos de hasta 29 m2. Son proyectos que dejó una gestión anterior y que aprobó después la Municipalidad de Lima.
¿Se prevé hacer cambios de altura en las construcciones?
No vamos a ampliar la altura de ninguna forma. Eso pasa por todo un ordenamiento, aunque el plan 2040 de la Municipalidad de Lima está impulsando el crecimiento de la zona, y nos señala la reducción de área de los departamentos y cambios de uso en la zonificación. En Miraflores vamos a ser muy respetuosos, porque si se ha mantenido siendo un distrito residencial, lo queremos conservar, sobre todo en las zonas que ya de por sí tienen dificultades por densidad. Sí hay que darles beneficios a quienes hacen una construcción sostenible.
¿Aún hay espacios en el distrito para desarrollo de centros comerciales?
Ya no existen espacios, lo que se busca ahora son desarrollar áreas de uso mixto, con un primer y segundo piso comercial, y que la parte superior sea utilizada para vivienda.
Y en tema de inversión hotelera, ¿se conoce qué cadenas buscan entrar al distrito?
Todos los hoteleros están interesados. Hay entre 10 y 12 empresas interesadas en invertir, pero buscan que se dé la oportunidad y que haya una mayor estabilidad política. Actualmente se está construyendo el hotel Intercontinental; la cadena Marriott busca ampliar su oferta con otro JW Marriott Hotel, y se prevé abrir el primer The Ritz Carlton, entre otros.