BDO Futura Farms
El equilibrio entre desarrollo y la naturaleza se ha quebrado y su manifestación más visible es el cambio climático donde los gases de efecto invernadero, son los grandes delincuentes que generan la elevación de la temperatura del mundo.
La comunidad científica está de acuerdo en la necesidad de tomar control y reducir el incremento de temperatura promedio a menos de 2ºC, caso contrario comenzaría una serie de eventos en cadena que llevaría al descalabro del planeta. Es por eso que la ONU, con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) busca tomar conciencia de nuestras acciones que generan un efecto en el ambiente. Los seres humanos tenemos la responsabilidad de dejarles un mejor planeta a nuestros descendientes.
¿Qué tipo de acciones pueden hacer frente a esta amenaza? La más lógica es reducir la concentración de CO2 en la atmósfera y esto sucede de dos maneras: 1) reducir el consumo de energía, algo muy difícil de lograr debido a que se atentaría contra el derecho al desarrollo de los países. 2) cultivar plantas que sean muy eficientes en absorber y fijar el CO2 de la atmósfera como lo es el bambú o el cáñamo o cannabis industrial.
El cáñamo es una planta genéticamente similar al cannabis sativa. Sus componentes más conocidos son el CBD que es un potente antiinflamatorio y el THC que es psicotrópico, sin embargo, en el cáñamo su nivel es muy bajo por lo que se permite cultivar en países como Francia, España, China y Paraguay sin restricciones.
El cáñamo ha sido uno de los cultivos más importantes de la civilización, habiendo sido fuente de alimento, fibra y papel. Con esta apertura, los científicos han comenzado a estudiar la planta y han descubierto muchas bondades adicionales entre las que se listan su alta capacidad de secuestrar CO2 convirtiéndolo en celulosa que puede ser transformada para la industria textil, empaques sostenibles y construcción. Adicionalmente es ideal para restaurar suelos contaminados y para usarla como contribución al mercado de bonos de carbono.
El cáñamo es una alternativa para el Perú, debido a que es una planta extremadamente productiva y sostenible que puede diferenciar al mercado peruano en mercados no-tradicionales. Paraguay es un ejemplo a seguir, el proyecto Hemp Hub Paraguay está generando una industria con alta “calidad de utilidades” debido a que es sostenible y se alinea con los ODS, de hecho, Paraguay utiliza esta industria para lograr la certificación de ser “Carbono Neutral” en el 2025. Esto explica por qué el cáñamo industrial atrae inversión, genera trabajo formal y genera impuestos; una oportunidad que también podríamos tener en el Perú.