La Junta de Gobernadores del OIEA, la agencia nuclear de la ONU, adoptó hoy en Viena una resolución que critica la ocupación militar rusa de la central atómica ucraniana de Zaporizhzhia e insta a Rusia a que detenga todas las acciones militares allí.
El texto, aprobado con una amplia mayoría de los 35 miembros de la Junta, asegura que la ocupación militar de Rusia “aumenta significativamente el riesgo de un accidente nuclear”.
Solo Rusia y China votaron en contra de la resolución, mientras que 26 países votaron a favor, y siete se abstuvieron, entre ellos, India, Pakistán y Egipto.
Todos los países de la Unión Europea (UE) en la Junta, además de Estados Unidos, Canadá, Argentina y Brasil, entre otras naciones occidentales, votaron a favor de la resolución.
Se trata de la segunda resolución crítica con Rusia adoptada por la Junta del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) desde el inicio de la guerra en Ucrania en febrero pasado.
Con el aumentado riesgo de un accidente nuclear “se pone en peligro las poblaciones de Ucrania, sus países vecinos y la comunidad internacional”, señala la resolución.
El texto expresa “grave preocupación de que Rusia no haya cumplido el llamamiento de la Junta a cesar de forma inmediata todas las acciones contra y en las instalaciones nucleares en Ucrania”.
Además, “deplora las persistentes acciones violentas contra las instalaciones nucleares en Ucrania, incluido el control a la fuerza de instalaciones nucleares”, en alusión a la planta de Zaporizhzhia.
Esta central, la más grande de Europa, ha sido objetivo de numerosos bombardeos desde en las últimas semanas.
Rusia y Ucrania se acusan mutuamente de ser responsables de esos ataques, que llegaron a suceder cerca de los seis reactores de la planta y otras instalaciones delicadas.
El OIEA tiene desde comienzos de setiembre a dos inspectores destacados en la planta Zaporizhzhia, situada en la zona ocupada por Rusia en el sureste de Ucrania.
Los seis reactores de la planta, todos conectados a líneas de alta tensión, están actualmente apagados en estado frío, lo que reduce la probabilidad de un accidente.
El director general del OIEA, Rafael Grossi, pide desde hace semanas que se establezca en torno a la planta una zona de protección y seguridad para evitar un accidente atómico.
El pasado lunes, Grossi dijo que hay señales de que las dos partes enfrentadas están “interesadas” en establecer una zona de protección, lo que exigiría un alto el fuego regional.