:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/OD7SB5IDHNFZTFKW2TAJOHBK5I.jpg)
La llegada de la digitalización continúa avanzando en el país, pero con ello también crece el riesgo en algunas actividades derivadas en la era digital.
Una de ellas está referida al uso indebido de marcas de productos o servicios que hoy se comercializan en el mercado peruano, señala a Gestión.pe el especialista en propiedad intelectual y patentes de ClarkeModet Perú, José Marquis.
Explica que se comete una infracción de marca cuando se vulneran los derechos del propietario, pues éste es el único que tiene derecho exclusivo al utilizar dicha marca.
Así -tomando los datos del Indecopi- detalló que entre enero y setiembre de este año se reportaron 904 denuncias por infracción a derechos de marcas, superior a las 815 denuncias registradas en todo el 2020.
“Ahora con la digitalización vemos un incremento de uso indebido de marcas a través de la venta online. Por ejemplo, ahora se podría fabricar unas zapatillas, le ponen una marca reconocida nacional o mundial y lo ponen en venta por internet en la página de Facebook, Amazon o un Marketplace”, sostuvo.
Blancos de imitación
Marquis señala que en el mercado peruano los sectores de prendas de vestir y calzado son los dos rubros donde más se cometen infracciones por uso indebido de marca.
Según explica, esto se debe a que ambos rubros son los que tienen un mayor dinamismo en el país, lo que lleva a que se realicen más imitaciones de productos. Agrega que esta situación se observó incluso desde antes de la pandemia del COVID-19 e incluso con la emergencia sanitaria no se observó una caída sobre estos hechos.
Precisó que las infracciones se cometen en dos ejes. La primera responde a que en el sector textil existen marcas de ropa que son conocidas mundialmente, por lo que su mismo prestigio hacen que sean un blanco imitación.
Por otro lado, en el mercado interno, muchos emprendimientos peruanos se han ganado su propio nombre, lo que lleva a que otros negocios ‘copien’ esas iniciativas.
“El objetivo del emprendedor es crecer, entonces a medida que crece su prestigio en el mercado, podría sobresalir una marca de un emprendedor nacional y luego en un taller puede salir un imitador, imita sus productos vendiendo en el mercado como si fuera el original”, sostuvo.
Situación similar ocurre en el mercado de calzado, cuyos productos hoy también se comercializan a través de medio digitales.
Otros sectores que enfrentan esta situación, aunque en menor medida, son los vinculados a juguetes, productos derivados de series, películas o videojuegos populares, así como accesorios electrónicos y repuestos para productos electrónicos.
Los riesgos
El especialista señala que, si un emprendedor comercializa su producto bajo su propia marca, pero no está registrada ante el Indecopi –entidad que protege la marca en territorio peruano- en cualquier momento un tercer podría tomar esa marca y utilizarla, lo que representa una pérdida financiera.
Esto debido, entre otros factores, a que el emprendedor tendrá que rehacer su línea de productos de servicios hacia un nuevo ‘branding’, cambiar el nombre de su empresa y poner en tela de juicio la calidad del producto.
“Ello sucede porque el producto que se encuentra imitado por otras personas lo producen con otras características o con menos duración. Ahí también hay una pérdida de prestigio”, apuntó.
El dato
Un emprendedor solo puede utilizar una marca ya registrada siempre y cuando tenga en su poder una licencia de uso de marca, que se obtiene realizando un determinado pago.
VIDEO RECOMENDADO:
