El petróleo cayó y registró su segunda semana seguida de pérdidas presionado por un débil crecimiento industrial en China que contrarrestó el alza en la confianza del consumidor en Estados Unidos a máximos de cuatro años.

Los futuros de crudo Brent cerraron con baja de 0.47 dólares, o de un 0.42%, a 112.26 dólares por barril. En la semana, el Brent cayó 0.92 dólares, o un 0.81%.

Los futuros para junio en Estados Unidos cerraron con una caída de 0.95 dólares, o un 0.98%, a 96.13 dólares.

En la semana, el crudo estadounidense bajó un 2.4%, con lo que extendió las pérdidas de las dos últimas semanas a un 8.4%, el mayor retroceso desde el 30 de septiembre del 2011.

El descenso del crudo Brent del 6.2% en las últimas dos semanas fue la mayor pérdida porcentual de dos semanas desde el 16 de diciembre. El petróleo estadounidense cayó un 8.4% en las últimas dos semanas, su mayor retroceso desde el 30 de septiembre.

Más temprano, los precios del crudo fueron presionados tras conocerse que la producción industrial china creció en abril al ritmo más lento en casi tres años.

El reporte se conoció después de decepcionantes cifras comerciales que se dieron a conocer el jueves y que indicaron que la economía china está mostrando vulnerabilidad a una desaceleración global.

La confianza del consumidor estadounidense subió a inicios de mayo a su nivel más alto en más de cuatro años, impulsada por el optimismo sobre el mercado laboral, mostró una lectura preliminar de la Thomson Reuters/Universidad de Michigan, lo que hizo que el petróleo estadounidense recorte pérdidas más tarde.

Los datos de confianza del consumidor impulsaron las acciones estadounidenses antes de que cerraran en baja.

La resistencia del mercado bursátil norteamericano. incluso después de las noticias de una pérdida inesperada de 2,000 millones de dólares por operaciones del gigante de Wall Street JP Morgan, también ayudó al petróleo a frenar su descenso inicialmente.

"El complejo estuvo volátil por las fuerzas opuestas de la aversión al riesgo relacionadas con las pérdidas en el sector bancario y del impulso que se generó por la recuperación inicial de las acciones", dijo Jim Ritterbusch, presidente de Ritterbusch & Associates, en una nota.

En China, la demanda implícita de petróleo bajó en abril al mínimo en seis meses y mostró el primer declive anual en al menos tres años, mientras las refinerías reducían la actividad para encarar un período de mantenimiento.

Los datos destacan el potencial impacto en China de la continua crisis en la zona euro.