El proceso de “minado” de la Bitcoin demanda cerca de 121.36 teravatios-hora (TWh) de electricidad al año. Es decir, si la criptomoneda fuera un país consumiría más energía que Finlandia, Suiza o Argentina, de acuerdo a un análisis del Centro de Finanzas Alternativas de la Universidad de Cambridge (CCAF) difundido por la BBC.
La Bitcoin es una criptomoneda cuyo valor está estrechamente ligado al consumo de electricidad. A medida que el precio de la divisa sube, se necesita de más energía. Y esto obedece al proceso de minado.
“Realmente es por su diseño que el bitcoin consume tanta electricidad. Esto no es algo que cambiará en el futuro, a menos que el precio de bitcoin baje significativamente”, señaló Michel Rauchs, investifador del CCAF, a la BBC.
¿Qué es el minado?
Para llevar a cabo las transacciones con Bitcoin es necesario que una serie de computadores especializados realicen complejas operaciones que extraen, descifran o “minan” la criptomoneda. Naturalmente, este proceso consume una alta cantidad de electricidad.
El gancho está en que los mineros pueden recibir pequeñas cantidades de Bitcoin por realizar esta tarea, lo cual estimula a que cada vez más gente se dedique al minado, y lo cual vuelve cada vez más difícil este proceso.
Entonces, los mineros conectan una gran cantidad de computadoras para acelerar el proceso y aumentar sus posibilidades de recibir Bitcoins en el camino, por lo que el minado funciona como una especia de lotería.
Y como estas máquinas trabajan sin descanso, las 24 horas del día, el recibo de luz suele reflejar todo este consumo.
Huella de carbono
Si bien el elevado consumo de electricidad suele relacionarse con una mayor contaminación, este no siempre es el caso en el terreno del Bitcoin.
La mayor parte de electricidad se genera a partir de combustibles fósiles, como el carbón, petróleo o el gas. Todos muy contaminantes. No obstante, también se usan energías renovables, como la eólica o hidroeléctrica, e incluso energía nuclear.
De acuerdo a Nic Carter, socio fundador de la firma de capital de riesgo Castle Island Ventures, en China hay mineros que aprovechan el excedente de energía de las hidroeléctricas que, de no usarse, se perdería. Lo mismo ocurre con la captura del metano descargado o quemado para generar la electricidad que requiere el minado.
Pese al debate ambientalista, Carter no ve mucho futuro a la minería del Bitcoin, pues el sistema fue diseñado para ser finito. “Este proceso está completado en un 88%”, apuntó.