Somos una Empresa B: la coherencia se convierte en nuestra mayor fortaleza

En sostenibilidad hablamos mucho de coherencia. Pedimos a las empresas mirar su impacto, transformar sus modelos de gestión y asumir responsabilidades que trasciendan lo financiero. Pero también sabemos que la coherencia es un camino desafiante, que exige mirarnos hacia adentro y preguntarnos si realmente vivimos aquello que impulsamos en otros. Por eso, alcanzar la certificación como Empresa B significa tanto para mí, para nuestro equipo y para Avanza Sostenible.

Este no es un logro técnico ni un sello más. Es la confirmación de que una organización pequeña, creada con la convicción de que la sostenibilidad puede cambiar la forma en que se hacen negocios en el país, ha logrado construir un modelo que refleja sus principios en cada decisión, proceso y servicio que ofrece.

El camino no fue sencillo. Evaluar nuestra propia gestión con la rigurosidad del B Impact Assessment nos obligó a detenernos, cuestionar prácticas, fortalecer políticas, formalizar aquello que siempre hemos hecho por convicción y demostrar con evidencia que somos una empresa que impacta positivamente a nuestros trabajadores, clientes, proveedores y comunidad. Y lo más valioso de ese proceso es que lo hicimos juntos.

Nada de esto habría sido posible sin el compromiso del equipo que me acompaña. Un equipo que no solo trabaja por impulsar la sostenibilidad en otras organizaciones, sino que también cree profundamente en ella. Que aporta ideas, horas, entusiasmo y un nivel de exigencia que me inspira todos los días. Esta certificación es de cada uno de ellos: de su dedicación, de su orgullo profesional y de la pasión que ponen en cada proyecto.

Desde el inicio soñé con construir una consultora que no compitiera por tamaño, sino por propósito. Que pusiera a las personas al centro, que actuara con transparencia, que demostrara que en el Perú sí es posible hacer las cosas de manera distinta. Ser Empresa B es la demostración más clara de que ese sueño es posible. Y es también un recordatorio de que aún podemos llegar mucho más lejos.

Para nosotros, este reconocimiento no es un punto de llegada, sino un compromiso renovado. Nos exige seguir mejorando, seguir inspirando y seguir demostrando que la sostenibilidad no es un discurso ni una tendencia, sino una forma de gestionar que tiene impacto real en la vida de las personas y en el futuro de nuestras organizaciones.

Como líder de Avanza Sostenible, me llena de orgullo saber que acompañamos a empresas a transformarse mientras nosotros mismos elegimos transformarnos. Que nuestros clientes pueden confiar en que cada recomendación, cada metodología y cada estándar que proponemos lo vivimos también dentro de casa.

Hoy celebramos, sí. Pero sobre todo reafirmamos nuestra convicción: construir empresas más humanas, más responsables y más sostenibles es el camino correcto. Y estamos comprometidos a recorrerlo con integridad, técnica y mucha pasión.