La pintura "Judith y Holofernes", atribuida a Caravaggio, que debía ser subastada el jueves en Francia, fue vendida a un comprador extranjero, anunció la casa de remates Marc Labarbe.
"La venta está protegida por un acuerdo de confidencialidad en lo que concierne al precio y a la identidad del comprador", precisó en un comunicado la casa Labarbe, que descubrió el lienzo en un desván en Francia en el 2014.
"Recibimos una oferta que teníamos que transmitir a los dueños de la pintura. El hecho de que la oferta venga de un coleccionista cercano a un gran museo convenció al vendedor de aceptarla", señaló en un comunicado el experto en arte Eric Turquin, que examinó la obra unos días después del hallazgo.
"Debemos aceptar la decisión de nuestro cliente vendedor", añadió el subastador Marc Labarbe.
El lienzo de un tamaño de 144 x 173 cm, que muestra a Judith decapitando a Holofernes, estaba estimado en hasta US$ 170 millones.
Los expertos determinaron que fue pintado en 1607 y aparentemente olvidado en una buhardilla durante más de 100 años hasta su hallazgo.
Un oficial en misión napoleónica podría haberlo traído desde Italia, pero todas las opciones están sobre la mesa.