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Con las maletas listas, los peruanos fueron alertados a través de los principales gremios aeronáuticos del país que Petroperú tendría un potencial desabastecimiento de combustible para las operaciones aéreas. Este problema duraría al menos unos 10 días, y afectaría el movimiento que se genera por Fiestas Patrias.
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Ricardo Acosta, presidente de la Asociación Peruana de Agencias de Viaje y Turismo (Apavit), calificó como “un golpe más al sector” este anuncio. “Nunca debimos llegar a este punto porque se trata de la temporada más alta para el turismo. Los paquetes y pasajes están full, ya vendidos”, dijo.
En ese sentido, detalló que, a nivel nacional e internacional, se moverán aproximadamente dos millones de peruanos por Fiestas Patrias. “En estos momentos nadie se atreve a cancelar un vuelo porque aún hay mucha incertidumbre. Desde el último fin de semana, los peruanos ya están saliendo”, anota.
“Si hay una interrupción el verdadero afectado será el pasajero porque se pierde la reserva del hotel, restaurantes, tours, alquiler de auto y, en el caso de las agencias de viaje empezaríamos a recibir muchísimas quejas que escapan de nuestras manos”, dijo.
Ante ello pidió al ministro de Comercio Exterior y Turismo, Roberto Sánchez, que solucione con prontitud el problema. Precisó que destinos como Cusco tienen mucha dificultad y esperan un turismo masivo por estas fechas.
Otros lugares muy afectados serían las playas del Norte, Tarapoto, Cajamarca, Trujillo, Chiclayo y Ayacucho.
Hoteles
De no solucionarse el desabastecimiento de combustible que afectaría el transporte aéreo, y por ende la movilización del turismo local y externo, la ocupación del sector hotelero en temporada de Fiestas Patrias se vería seriamente afectada, advirtió por su parte la Sociedad de Hoteles del Perú (SHP).
Y es que los hoteles de entre tres y cinco estrellas del país solo esperarían contar con una ocupación de alrededor el 30% en la semana del 24 al 31 de julio, cuando lo proyectado era tener un “nivel alto” de entre 80% y 90%, indicó la gerente general del gremio, Tibisay Monsalve.
“Es que se comenzarían a recibir cancelaciones tanto de los turistas locales, que son el 90% de los que se movilizan por esta temporada, como del 10% de los extranjeros que también llegan por estas fechas”, dijo.
Esto agravaría aún más la situación del sector, ya que se sumaría un problema más a la ya complicada coyuntura de paros y manifestaciones que afectan la decisión del turista de viajar, advirtió.
Los hoteles más afectados serían los ubicados en las playas del norte, que tienen gran demanda en estas fechas, ya que requieren transporte aéreo para llegar. En contraparte los que se impactarían menos serían los hoteles del sur de Lima como los de Cañete, Paracas, Chincha, Ica, debido a que los turistas pueden llegar en transporte terrestre, indicó.
Se proyecta mala imagen en el exterior
El presidente de Apavit, Ricardo Acosta, se preguntó si “¿al Gobierno no le basta con la tacha que nos hizo Estados Unidos?”; encima hoy se reafirma lo recomendado por los americanos a sus compatriotas porque no hay combustible. Es demasiado, afirmó.
El representante recordó que, tras la alerta de Estados Unidos sobre Perú, se redujeron en 30% las reservas de los residentes en dicho país.
“No basta con la huelga de controladores aéreos, cierre de carreteras, tardanza en emisión de pasaportes, paros. Es un maltrato constante”, afirmó.
Advirtió que esta situación afecta el turismo receptivo porque americanos y orientales reservan sus vacaciones un año antes y prefieren visitar otros lugares antes que atravesar problemas como quedarse varados en Perú porque no hay combustible o se cancele su reserva.
“Tenemos como antecedente a los 3,500 turistas que se quedaron en Aguas Calientes debido a una huelga, estamos muy mal. El Gobierno puede gastar millones en promocionar el Perú, pero lo borra con la otra mano”, dijo.
A ello, se suma la inestabilidad política que “se expone a nivel mundial”, afirmó.
Otrosí digo
Preocupación. El presidente de Apavit, Ricardo Acosta, señaló que ante el posible desabastecimiento de combustible, líneas aéreas europeas podrían suspender sus vuelos al Perú temporalmente como lo han hecho antes. “Si no hay cómo recargar, tienen que dejar de venir a Lima. Recordemos que cada vuelo trae alrededor de 250 pasajeros”, dijo.
La situación, anotó, genera impacto en toda la cadena que envuelve al turismo: desde guías has-ta restaurantes.