Tras casi dos meses perdidos (diciembre del 2022 y enero del 2023) por efecto de las protestas -con actos de violencia- que sufrió el Centro Histórico de Lima, los comerciantes de esta zona (en su mayoría mypes y pymes) empiezan a recuperarse.
El primer paso lo empezó a sentir esta semana a raíz de las celebraciones por San Valentín que han permitido que las ventas de los comerciantes del centro de Lima se recuperen en -casi- 80% como en los comercios de Jirón de la Unión.
“Las ventas por ocasión de San Valentín se han nivelado en casi un 80%. Recuerde que en enero cayeron tremendamente ya que no se podía atender a nadie”, comentó a Gestión el exvicepresidente de la Asociación de Comerciantes de Jirón de la Unión, Salvador Ode.
Una situación similar mencionó el gerente general de la Confederación Nacional de Comerciantes (Conaco), Eduardo Estrada. Este sostiene que las ventas de los negocios del Centro Histórico por ocasión del día del Amor y la Amistad treparon en 20%.
“Hemos tenido una ligera recuperación (en las ventas) a raíz del día de los enamorados en 20% en relación a lo que estábamos. Lo que va acompañado a que las marchas han bajado lo que en algo nos ha ayudado”, subrayó.
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Ahora la apuesta es que las ventas vuelvan a niveles prepandemia en dos meses (apuntando a la campaña del Día de la Madre) aprovechando la medida dispuesta desde la comuna capitalina que -en la víspera- emitió un acuerdo declarando la intangibilidad del Centro Histórico de Lima, la misma que respaldan.
Es decir que queda prohibido -de manera definitiva- el desarrollo de marchas, manifestaciones y concentraciones públicas y políticas que pongan en riesgo la seguridad y/o salud pública.
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“Nosotros saludamos esta medida en un momento que necesitamos reactivarnos. Ha sido la mejor propuesta en años, pensando en los miles de comerciantes que hay en el Centro Histórico de Lima. En ese sentido, hacemos votos para que esta medida tenga los resultados que tanto anhelamos y sobre todo se cumpla”, anotó Estrada.
En el Centro de Lima conviven -aproximadamente- 100,000 comerciantes de todos los tamaños, principalmente mypes y pymes.
“De esta forma se da un alivio a los empresarios que -en muchos casos- estamos al borde de la quiebra. Si no hay ventas tampoco hay ingresos”, añadió.
“Esta medida (la intangibilidad del Centro Histórico) es positiva porque va llevar tranquilidad -después de mucho tiempo- ya que son años de problemas y últimamente destrozos. Nosotros saludamos al Concejo Metropolitano por la decisión. Esperamos que las autoridades la haga cumplir y que una vez por todas se tome conciencia que si bien existe el derecho manifestarse, también existe mi derecho de tránsito y al trabajo”, sostuvo Ode.
Si bien las rejas -que se colocaron durante al mandato de Castillo- en el Centro Histórico, que impedían el libre tránsito de las personas han sido sacadas, aún persisten enrejadas -impactando negativamente a los comercios- las calles colindantes al Congreso, situación que pone en riesgo la supervivencia de estos negocios, subrayó Estrada.
“Hay zonas que se mantienen enrejadas como son las calles cercanas al Congreso. Te hablo de la calle Junín y las cuadras 3 y 4 del jirón Ayacucho, que está causando un perjuicio negativo a los comerciantes -cerca de 900- que no están vendiendo. Se ha mandando un oficio al Ministerio del Interior para que levanten esta medida”, dijo.
Así, aprovechando la intangibilidad del Centro Histórico, los empresarios se alistan a ofrecer descuentos y ofertas para animar la visita y -sobre todo- la compra. La mirada está puesta en la campaña escolar y, a la más grande, que es la del Día de la Madre.
“Para la campaña escolar se están organizando sorteos, descuentos, rifas, shows, entre otros, en la zona del Mercado Central, Mesa Redonda, Jirón de la Unión y en todas las zonas comerciales. La idea es recuperar el tiempo perdido como pasó con las campañas de Navidad y Año Nuevo que se perdió ya que muchos clientes se vieron obligados en hacer sus comprar en distritos más seguros”, afirmó el dirigente de Conaco.
El objetivo es que las ventas retornen a niveles prepandemia.
“Actualmente estamos a un 40% de las ventas que se tenían en la época prepandemia y la meta es llegar en dos meses a niveles prepandemia. Para mayo -que viene la campaña por el Día de la Madre- apuntamos a tener un objetivo más claro en cuanto a recuperación económica”, indicó.
“Estamos coordinando con la Municipalidad de Lima para organizar actividades que promuevan la visita al Centro Histórico. A la par se viene promociones para la campaña escolar -por ejemplo- las tiendas de calzado están brindando buenos precios”, agregó Ode.
Entre las consecuencias que han traído las protestas por casi dos meses en el Centro Histórico -además de las pérdidas económicas- se encuentra que el 10% de los empresarios (10,000) que tenían sus negocios en esta zona, decidieron emigrar a otros distritos como Los Olivos, por ejemplo.
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A lo que se añade que el 5% de los empresarios quebraron, lo que implica que 5,000 comercios cerraron. Ahora, lo comerciantes se alistan a buscar capital de trabajo tras el cese de las protestas y la intangibilidad emitida.
“Estamos tocando puertas ya sea al Ministerio de la Producción como a las Cajas Municipales para capital de trabajo, ya que sabemos que tienen programas de apoyo a las mypes. El capital de trabajo a solicitar depende de cada negocio, pero una empresa mediana puede necesitar S/100,000 aproximadamente para comprar mercadería, por ejemplo”, afirmó Estrada.
Intangibilidad de Lima necesita precisiones
Enrique Bonilla Di Tolla, director de la carrera de Arquitectura de la Universidad de Lima, consideró que la intangibilidad dispuesta necesita “precisiones”.
“Por ejemplo, se hace alusión al Estado de Emergencia, pero en la parte resolutiva no lo específica cuando debería ser (la intangibilidad del Centro de Lima) mientras dure el Estado de Emergencia. El uso del espacio público en el Centro Histórico es muy importante porque es de todos, debe ser accesible a todos, y esta medida podría ser contraproducente para la conservación”, advirtió.
Para el especialista, la medida dispuesta no debería ser permanente ya que “se estaría decretando la muerte del Centro Histórico”.