El registro nacional de ¡Gracias… no insista!, que tiene a cargo Indecopi se había creado para que los consumidores no reciban llamadas de las empresas que promocionaban sus productos.
Aunque el servicio era gratuito y online, no había logrado el éxito esperado según detalla el Ejecutivo, pues solo el 0.4% de los usuarios de celulares había podido realizar la inscripción en dicho registro, es decir 180 mil números de más de 38 millones de usuarios.
Lo mismo pasó con el registro con las líneas fijas, que solo se tiene un registro de 87 mil líneas, sobre un universo de 2.8 millones de usuarios.
Ante ello, el Ejecutivo propone la eliminación del registro: Gracias… no insista, para que el acceso de las promociones que realizan las empresas sea al revés, es decir, que primero sean los usuarios quienes permitan la promoción y con ello las empresas puedan realizan las llamadas telefónicas o el envío de correos.
En la propuesta legislativa se señala que el código del consumidor tiene que llevar acciones contra prácticas que afecten los legítimos intereses y que distorsionen el mercado.
Con esta modificación, se “establece el derecho del consumidor que el derecho de todo consumidor a la protección contra los métodos comerciales agresivos o engañosos implica que los proveedores no pueden llevar a cabo prácticas que mermen de forma significativa su libertad de elección a través de figuras como el acoso, la coacción, la influencia indebida o el dolo.
Asimismo, el Gobierno detalla que, si bien se considera que la competencia y la información son aspectos positivos en una economía en desarrollo, se ha podido evidenciar que se ha vuelto una práctica recurrente que los proveedores utilicen diversos medios (llamadas telefónicas, mensajes de texto, correos electrónicos, entre otros) para promover la contratación de servicios o la adquisición de productos no solicitados ni autorizados por los consumidores.
Mecanismo actual y el cambio
En el actual sistema, se permite a las empresas realizar llamadas a consumidores empleando centros de llamada, sistemas de llamado telefónico, envío de mensajes de texto o electrónicos, entre otros, a consumidores y ciudadanos en general, que tengan o no una relación comercial con el proveedor.
Detallan que, el único supuesto para que el consumidor o ciudadano no sea llamado o no sea receptor de mensajes a través de esta práctica comercial es que se inscriba en el registro implementado por el Indecopi (denominado “Gracias ... no insista”).
“Ello implica un acto de inscripción en un registro que debe realizar el consumidor o ciudadano y que tiene un costo para él (si bien el registro es gratuito, implica esfuerzo y tiempo para el consumidor o ciudadano)”, detallan en la propuesta de Ejecutivo.
En la iniciativa, se plantea que el consumidor o ciudadano no requerirá realizar un acto de inscripción en un registro a fin de que no sea llamado o para no recibir mensajes de texto o electrónicos, entre otros, a través de esta práctica comercial, sino que primero este debe consentirlo
“La regla general que establece el Proyecto de Ley del Ejecutivo consiste en que los proveedores no puedan realizar llamadas o envio de mensajes o cualquier otro método comercial a menos que el consumidor o ciudadano haya consentido expresamente para que dicho proveedor utilice este método comercial”, sostiene.
Detallan que, el consentimiento debe ser previo, informado, expreso e inequívoco. Se suprime así el registro y ante reclamaciones de los consumidores por incumplimiento de este artículo, el proveedor tendrá la carga de probar que el consumidor le brindó consentimiento para utilizar este método comercial.
Este este el formulario del Gracias... no insista. (Haz clic para ingresar)
Haga clic aquí para conocer el proyecto de Ley del Ejecutivo enviado al Congreso