(Bloomberg).- El éxito del ha transformado la suerte de decenas de proveedores, desde fabricantes de vidrio hasta los de robots que cortan cajas de metal.

Ahora que se apresta a introducir un nuevo teléfono inteligente con una pantalla OLED, una empresa japonesa de refinería más conocida por su cadena de gasolineras está a punto de sumarse a la lista.

Idemitsu Kosan Co. comenzó a experimentar con diodos orgánicos de emisión de luz a mediados de la década de 1980, tratando de reducir su dependencia del crudo después de la crisis petrolera mundial.

Ahora, es probable que los píxeles azules de las pantallas OLED del último teléfono inteligente Pixel de Google o un modelo Galaxy de Samsung Electronics Co. que tenga en la mano estén hechos con materiales o patentes de Idemitsu.

La creciente adopción de las pantallas avanzadas, que ofrecen imágenes nítidas y utilizan menos energía de la batería, está poniendo el foco en proveedores japoneses que hasta ahora prácticamente no tenían participación en las ventas del iPhone.

[Etiqueta]
[Una pantalla flexible hecha con tecnología OLED. Foto: OPERA de Kyushu University]

Canon Tokki Corp., por ejemplo, tiene un cuasi monopolio de las gigantescas máquinas de vacío que pueden fabricar pantallas OLED. Dai Nippon Printing Co. y Toppan Printing Co. son fabricantes líderes de mallas metálicas finas necesarias para imprimir los píxeles OLED.

"Samsung ha estado usando pantallas OLED por algunos años, pero con Apple adquiere gran ímpetu", dijo Alberto Moel, analista de tecnología de Sanford C. Bernstein & Co. "Hace que todos quieran hacer lo mismo".

Apple planea enviar al menos un nuevo iPhone con una pantalla OLED este año, en el décimo aniversario del estreno del producto, dijeron personas con conocimiento de la materia.

El uso de las pantallas OLED por parte de la compañía con sede en Cupertino, California, elevará la demanda por centenares de millones de unidades, según cálculos del sector. IHS Markit pronostica que superarán las pantallas de cristal líquido para los paneles de teléfonos inteligentes este año en un mercado que se espera llegue a US$ 22,700 millones en el 2017.

El improbable papel de Idemitsu en la tecnología OLED proviene de sus primeras investigaciones en diodos azules, que no duran tanto, pero son fundamentales para ofrecer una gama completa de colores en pantallas. La luz azul tiene una frecuencia más alta que el rojo y el verde, con la suficiente energía como para descomponer los enlaces químicos.

Los OLED han ofrecido la promesa de mejores pantallas durante decenios aun cuando el mercado era dominado por los LCD, o pantallas de cristal líquido. Las pantallas OLED pueden ser más delgadas, más eficientes energéticamente y producir colores negros más profundos porque los píxeles orgánicos pueden brillar por sí solos, mientras que los LCD requieren de un panel con trasfondo iluminado.

También pueden fabricarse en plástico flexible para una mayor variedad de formas y aplicaciones. El reto ha sido crear pantallas brillantes de larga duración a precios bajos.

Cuando Idemitsu comenzó a su desarrollo en 1985, el OLED era poco más que una promesa científica. Durante una década, la segunda refinadora más grande de Japón hizo esfuerzos denodados por fabricar materiales que duraran más que unos pocos segundos, hasta un avance que prolongó la longevidad. Ello permitió a Pioneer Corp. incluir la primera pantalla OLED comercial del mundo para un estéreo de autos en 1999.

"Estuvimos allí desde el principio", dijo Yuichiro Kawamura, investigador principal del centro de desarrollo de materiales electrónicos de Idemitsu.