Una empresa dirigida por Trump presentó ya los planes, que incluyen la preservación de los cuatro campos de golf, incluido el famoso Blue Monster, según la publicación económica South Florida Business Journal. (Foto: AFP)
Una empresa dirigida por Trump presentó ya los planes, que incluyen la preservación de los cuatro campos de golf, incluido el famoso Blue Monster, según la publicación económica South Florida Business Journal. (Foto: AFP)

El expresidente de , planea construir cuatro torres con un total de 2,300 viviendas de lujo y locales comerciales en su complejo turístico y campo de golf de la ciudad de Doral, aledaña a Miami (Florida) y de gran población venezolana.

El proyecto Doral International Towers, que no llevará el nombre de Trump, fue anunciado en días pasados por el expresidente republicano en una breve declaración y cursa ahora el proceso de aprobación por parte de las autoridades de la ciudad.

La idea, según Trump, es construir en su Doral Golf Resort “el desarrollo más emocionante en el país”.

El pasado 17 de enero Trump avanzó en un comunicado que pensaba solicitar permiso para construir “2,300 unidades de viviendas de lujo, tiendas y espacio comercial en la Fase 1 en Doral”.

Una empresa dirigida por Trump presentó ya los planes, que incluyen la preservación de los cuatro campos de golf, incluido el famoso Blue Monster, según la publicación económica South Florida Business Journal.

Detalló que Trump Endeavour LLC, propietaria del campo del golf y hotel, presentó una enmienda de uso de la tierra ante la ciudad el 14 de enero, buscando cambiar el uso de 54 acres de la propiedad a “uso mixto”.

Los planes disminuirían el número de habitaciones de hotel en unas 200 hasta un total de unas 450, indicó.

En la declaración, Trump subrayó que acababa de “gastar millones de dólares en el campo de golf Blue Monster, uno de los mejores campos del mundo y uno de los favoritos de los jugadores del PGA Tour”.

Según el South Florida Business Journal, el plano preliminar incluye cuatro torres de 42 pisos cada una, que aún están pendientes de la aprobación de la Administración Federal de Aviación (FAA, en inglés) debido a su cercanía con el Aeropuerto Internacional de Miami (MIA).