Los registros de la Casa Blanca entregados al comité legislativo que investiga el asalto al Capitolio tienen un vacío de 7 horas y 37 minutos en lo que respecta a las llamadas recibidas o realizadas ese día por el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Así lo señalan documentos obtenidos por el diario The Washington Post y la cadena CBS, que dieron a conocer su contenido este martes.
Ambos medios indican que no hay anotaciones en los archivos de la Casa Blanca de ninguna llamada recibida o hecha desde el teléfono del exmandatario (2017-2021) desde las 11:17 a las 18:54 hora local del 6 de enero del 2021.
En ese intervalo, cientos de seguidores del entonces mandatario irrumpieron en la sede del Congreso de Estados Unidos mientras se celebraba una sesión conjunta de las dos cámaras para ratificar la victoria del demócrata y ahora presidente, Joe Biden, en los comicios del 2020, en los que se enfrentó a Trump.
Según The Washington Post y la CBS, los Archivos Nacionales de Estados Unidos entregaron este año 11 páginas de registros de la Casa Blanca, con el diario oficial del presidente y los registros de llamadas de la centralita de la mansión presidencial, al comité de la Cámara Baja que investiga el ataque al Capitolio.
Esos registros muestran que Trump estuvo activo al teléfono durante parte de la jornada y que habló con al menos ocho personas por la mañana y once por la tarde.
Ese vacío de más de siete horas contrasta con las informaciones aparecidas en los medios de que Trump habló con sus aliados mientras se producía el asalto, como con el senador Mike Lee y el líder de la minoría republicana en la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy.
Dos personas conocedoras de la investigación legislativa indicaron a The Washington Post y la CBS que el comité está intentando averiguar ahora si Trump se comunicó ese día a través de canales secundarios, como teléfonos de sus ayudantes o dispositivos desechables.
La comisión investigadora está también tratando de confirmar que efectivamente ha recibido los registros completos de la Casa Blanca.
Un miembro de ese comité ha señalado que están llevando a cabo pesquisas sobre la posibilidad de “una ocultación” por parte de la Casa Blanca de los registros telefónicos, mientras que otra persona conocedora del trabajo de la comisión afirmó que ese vacío ha suscitado “un interés intenso” entre los legisladores.
En las llamadas que sí aparecen en esos documentos hay dos conversaciones entre Trump y su exasesor Steve Bannon, que el día anterior había dicho en un pódcast que “todo el infierno se va a desatar mañana”.
En una de esas llamadas, Bannon instó a Trump a continuar presionando a su vicepresidente, Mike Pence, para que bloqueara en el Congreso la ratificación de la victoria de Biden, revelaron personas que conocen el contenido de esa conversación a The Washington Post y la CBS.
Trump solía usar varios teléfonos cuando estaba en la Casa Blanca: en ocasiones, cuando hacía llamadas, el número que aparecía en el dispositivo del receptor era el de la centralita de la Casa Blanca, en otras eran otros números y a veces ninguno, dijeron las fuentes.
En un comunicado anoche, el expresidente afirmó que no tiene “ni idea” de lo que es un teléfono desechable. “Nunca he visto esa expresión”, zanjó.