Argentina prorrogó nuevamente, al 19 de junio, el plazo para el canje de unos US$ 66,000 millones de deuda emitida bajo legislación extranjera, y presentará muy pronto una nueva oferta a sus acreedores, informó el Ministerio de Economía.
Argentina está analizando sugerencias “sobre los diferentes caminos para mejorar los cobros y maximizar el apoyo de los inversores, al mismo tiempo que preserva sus objetivos de sostenibilidad de la deuda”, indicó un comunicado emitido este viernes cuando vencía el último plazo oficial.
“Argentina y sus asesores pretenden aprovechar esta extensión para continuar con las discusiones y permitirles a los inversores continuar contribuyendo con una reestructuración de deuda exitosa”, añadió el texto.
Esta es la tercera vez que se extiende el plazo para el canje, desde que el 8 de mayo la gran mayoría de los acreedores rechazó la primera oferta que contemplaba un plazo de gracia de tres años y una reducción de 62% en intereses y de 5.4% en capital.
Aún se desconoce cuáles serán los términos de una nueva oferta.
“Está claro que Argentina debe encontrar un acuerdo con los acreedores, está claro que los acreedores no aceptaron la (primera) oferta” hecha en mayo, dijo el presidente Alberto Fernández esta semana. “Está claro que la Argentina va a mejorar su oferta”, aseguró sin dar más detalles.
Argentina cayó en default el pasado abril, al incumplir con el pago de unos US$ 500 millones en intereses de tres de los bonos sujetos al canje.
Si logra un acuerdo con los acreedores el default quedaría superado.
En esta renegociación de deuda hay bonos del 2005 y 2010, producto de una anterior reestructuración, y también nuevos títulos emitidos a partir del 2016.
La deuda pública argentina totaliza unos US$ 324,000 millones, equivalentes a casi 90% de su Producto Bruto Interno (PBI).