A pesar de la importante oferta existente en entidades financieras en el país, los peruanos no utilizan completamente los servicios y beneficios que ofrece este sistema. Así, el Estudio Nacional del Consumidor Peruano (ENCP) 2024 para Entidades Financieras, elaborado por Arellano Consultoría, revela la actual situación de los usuarios al momento de vincularse con estas instituciones; además, de los retos aún pendientes en este campo.
De este modo, el informe indica que actualmente existe un 65% de peruanos bancarizados (cliente actual de un banco, caja municipal o financiera), lo que significa un avance de 11 puntos porcentuales (p.p.) en relación al 2022, cuando la población bancarizada era de 54%. En el detalle, Lima es la que muestra un mayor crecimiento al transitar de 56% (en el 2022) a 71%; en tanto, la escalada de provincias fue más tímida con un avance de 49% (2022) a 53%.
“Si bien la bancarización ha crecido en segmentos socioeconómicos como el A y el B, donde podemos ver realmente un despegue importante es en el sector C, que alude directamente a la clase media”, señaló Jorge Rubiños, director Comercial de Arellano Consultoría.
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Frente a esta situación, el especialista sostuvo que la billetera digital ha impulsado significativamente la bancarización, considerando que las plataformas digitales utilizan el sistema financiero, de modo que los usuarios requieren del vínculo con el banco; en tanto, tienen la oportunidad de evaluar los beneficios que brindan estas entidades.
¿Dónde ahorran y se prestan los bancarizados?
El estudio también da cuenta que aún cuando la bancarización viene creciendo, todavía hay un 38% de usuarios de este segmento (bancarizado) que prefiere ahorrar en casa antes de depositarlo en una entidad financiera, igual que un 88% de no bancarizados que eligen el hogar como lugar de resguardo del dinero.
“No es un ahorro de largo tiempo, dado que la persona ahorra en su casa por un tema de urgencia y disponibilidad, no olvidemos que el peruano al ser un emprendedor nato siempre necesita tener efectivo”, recalcó el experto de Arellano Consultoría.
Rubiños manifestó que dicha situación crea una oportunidad en el sector financiero, a fin de ofrecer productos que permitan captar el dinero que hoy tienen los usuarios bancarizados y no bancarizados en casa e introducirlo al sistema. “Ante una mayor bancarización, el reto ahora es el desarrollo de productos (tarjetas de crédito, productos de ahorro, entre otros) que satisfagan las necesidades de los clientes. Todavía hay oportunidad para seguir sacándole millaje al usuario bancarizado y no bancarizado”, enfatizó.
Sin embargo, los desafíos del sector son mayores, teniendo en cuenta que un 35% de usuarios bancarizados la última vez que solicitaron un préstamo recurrieron como primera opción a un familiar antes que un banco, caja municipal o financiera (34%); en tanto, existe un 11% que asistió a un amigo para obtener los fondos. Estos créditos están dirigidos, principalmente, a cubrir gastos de salud imprevistos, así como pagar deudas; ello, en el segmento bancarizado como en el no bancarizado.
“Si queremos seguir desarrollando el crédito formal, tenemos que identificar necesidades de los usuarios y ahí apuntar con los productos. Por ejemplo, vemos que un 24% que solicita un crédito formal lo hace para ampliar o arreglar su casa, que podríamos decir es un gasto planificado. Y así hay otro tipo de requerimientos en los que el sector debe poner atención para brindar el producto ajustado a la demanda del cliente”, expresó Rubiños.
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Penetración de las tarjetas de crédito
De acuerdo al informe de Arellano Consultoría, solo un 12% de peruanos cuenta con una tarjeta de crédito de banco (BCP, BBVA, entre otros), significando un muy ligero avance en comparación al 11% que tenía el plástico en el 2022. Entre las razones por la que los usuarios no tienen este producto figuran el miedo a endeudarse o a ser víctima de un robo o una estafa.
“El miedo a endeudarse con la tarjeta de crédito habla de la educación financiera que aún debe desarrollar el peruano. En torno al miedo por un robo, las entidades pueden trabajar poniendo topes a las tarjetas o apelar a los seguros y microseguros; es necesario guiar a los usuarios en el camino. Hay un espacio para crecer porque un 12% todavía es bajo en la penetración”, indicó.
En torno a las billeteras digitales, son Yape y Plin, con un 95% y 75%, respectivamente, las más conocidas por los peruanos, especialmente, entre los niveles socioeconómicos A, B y C. Así, los usos más recurrentes son compras en físico, enviar o recibir dinero y pagar el taxi, mientras que las personas que no las utilizan aducen que tienen miedo a que les estafen o simplemente prefieren pagar en efectivo. “Estas billeteras han democratizado la inclusión social”, finalizó el especialista.
Ficha técnica
Público objetivo: 5,493 que participan en la toma de decisiones de compra y consumo de las áreas urbanas del Perú (Hombres y mujeres de 18 a 65 años, de todos los NSE).
Técnica: Encuesta personal en hogares
Fecha de campo: Del 26 de febrero al 12 de abril del 2024
Tipo de muestra: Probabilística
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Licenciada en Comunicación Social por la Universidad Nacional del Santa. Con 11 años de experiencia profesional en comunicación escrita y digital. Trabaja en el Diario Gestión desde noviembre del 2021. Laboró anteriormente en la Sociedad Nacional de Industrias y el diario La Industria de Chimbote.
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