El mercado de restaurantes dirigidos a los estratos A y B sigue atrayendo nuevos jugadores; así, ingresa a competir “Anacardo”, de comida peruana moderna con toques europeos, que abrió un local de más de 600 metros cuadrados en el distrito de San Isidro.
Lo atractivo de este mercado, destacó la gerente del referido restaurante, Cecilia Brenneisen, es que la recuperación de la inversión en este tipo de negocio se da en un período de seis meses; y aún la competencia no es muy grande, ya que principalmente compiten alrededor de siete marcas en Lima.
“El local que cuenta con un 80% de área de terraza, y con un 20% de salón privado, se encuentra ubicado entre Los Laureles y Dos de Mayo, ya que esta zona se ha convertido en un boulevard gastronómico, y faltaba ofrecer un concepto distinto, ya que hay una potencial demanda del público sanisidrino y de las zonas aledañas, tanto de familias como de ejecutivos”, dijo.
Es por el referido potencial, señaló, que en un primer año de operación esperan alcanzar un 60% de participación de mercado.
Expansión
El referido restaurante boutique gourmet, que tiene como socio fundador a Alejandro Vautravers (ex gerente general del Hotel Sheraton), y en el que se ha invertido más de US$500,00, tiene como uno de sus diferenciales contar con dos boutiques especializadas, una de chacurtería y vinos “de marcas reconocidas”; y la otra de dulces hechos en casa o de proveedores exclusivos, así como de arreglos florales, señaló Cecilia Brenneisen.
“Se cuenta además con diferentes ambientes para vivir experiencias distintas de acuerdo al público, adultos mayores, familias, jóvenes, ejecutivos; así como con salones privados para reuniones o celebraciones”, agregó.
Adelantó que el restaurante planea iniciar su expansión el próximo año, sumando un segunda sede en el distrito de Miraflores.
CLAVES
- Gasto. El ticket promedio del restaurante (sin incluir vinos) es de S/60.
- Capacidad. El local cuenta con espacio para 110 comensales por turno.