Perú posee más variedades de cacao que ningún otro país: el 60% de las que existen a nivel mundial. Por ello goza de potencial para ser un importante exportador de los chocolates más finos, sin embargo hasta hace cinco años el 70% de sus envíos al exterior eran de cacao en grano o en cáscara, es decir de producto sin valor agregado.
Pero esta situación ha ido cambiando significativamente en los últimos 10 años. “Entre el 2010 y el 2019 la tendencia a una mayor participación de los productos de cacao con valor agregado ha crecido mucho. En el 2015 solo representaban el 30% y ahora son básicamente la mitad de las exportaciones de cacao. Esa tendencia va a seguir en los próximos años”, indicó a Gestion.pe José Iturrios, director de la Alianza Cacao Perú, que reúne a instituciones públicas y privadas.
Cabe recordar que el Perú produce unas 130,000 toneladas de cacao cada año y solo unas 17,000 se consumen en el mercado interno. Más del 80% se destina a la exportación.
Al cierre del 2019, el 53 % de las exportaciones de cacao (US$ 156 millones) tenían valor agregado (manteca, polvo, pasta y chocolate), mientras solo el 47 % fueron envíos (unos US$ 138 millones) de productos sin valor agregado (grano entero o partido crudo), según cifras de Promperú. ¿Cómo ocurrió esto?
Iturrios sostiene que el crecimiento de la demanda mundial de chocolate ha impulsado a los productores nacionales, tanto industriales como artesanales, a apostar por el cacao procesado y el chocolate. “La demanda creciente de chocolate, manteca y polvo de cacao ha hecho que los productores tomen esta oportunidad. Es básicamente un esfuerzo privado, al que se sumó la promoción de Perú como país chocolatero, realizada por Promperú”, expresó.
Los principales destinos de la manteca de cacao peruana son los Estados Unidos y Países Bajos, mientras el cacao en polvo se dirige a EE.UU. y Argentina; la pasta de cacao a EE.UU. y España; y el chocolate a EE.UU. y Bolivia.
El procesamiento del cacao y/o la elaboración del chocolate los llevan a cabo cuatro grandes empresas industriales y las cerca de 200 plantas artesanales existentes en el país, que adquieren el cacao de los productores. Del total de exportaciones de cacao, las de chocolate representan alrededor del 10% en valor.
“Por ejemplo Nestlé, al ver el posicionamiento que ha logrado el Perú como productor de cacao y de chocolates de gran calidad, recientemente ha decidido producir aquí en el Perú una línea de chocolates con alto contenido de cacao fino de aroma, de la zona norte del país, lo que es todo un logro”, comentó.
Como retos para exportar más chocolate, el director de la Alianza Cacao Perú sostiene que el país debe reforzar su estrategia de posicionamiento como origen confiable de cacao y chocolate; e invertir en mejorar la logística para la exportación.
Expectativas para este año
Iturrios proyecta que este año habrá un ligero crecimiento de las exportaciones que alcanzarían los US$ 300 millones (vs. los US$ 290 millones del 2019), por un repunte en el segundo semestre.
De enero a junio, hubo una caída del 20% en volumen en relación con el mismo periodo del año anterior, sin embargo en valor la caída solo fue del 15% debido al incremento del precio del cacao, por una menor oferta en el mercado internacional.
A mediados de julio se inauguró la XI edición del Salón del Cacao y Chocolate, que este año se realiza de manera virtual. En ella ya se registraron más de 154 mil interacciones con 160 marcas de chocolate. Los organizadores esperan alcanzar ventas por al menos medio millón de dólares hasta el 31 de diciembre, fecha en la que concluiría el evento.