Cuando uno se decide a alquilar un inmueble siempre aparece esta duda: ¿quiénes serán los inquilinos?
El riesgo existe y se expresa de varias maneras. El más común es si el arrendatario es una persona morosa o deudora; es decir, no paga. Pero el peligro podría ir más allá si es que, por azares de la vida, el inquilino resulta algún delincuente.
"El futuro arrendatario puede ser una persona natural o jurídica. Lo que a ti te preocupa es que esa persona se porte bien en todo el sentido de la palabra", señaló a Gestión.pe el abogado Martín Mejorada.
Mejorada, del Estudio Rodrigo, Elías & Medrano, afirma que lo principal es tomar todas las precauciones, y estas incluyen a Facebook.
Vía pública
La primera opción debe ser recurrir al Estado. Hace poco el Poder Judicial (PJ) implementó una ley promulgada hace cuatro años que la obligaba a elaborar un registro de los deudores en el país.
Hoy la herramienta existe y está online. El Registro de Deudores Judiciales Morosos (Redjum) permite buscar si alguna persona tiene sentencias por deudas con el Estado o privados.
Para Carlos Chueca, gerente general de Inquilinos Morosos, esta iniciativa no es suficiente.
"Cuando una persona es desalojada, puede ser desalojada por vencimiento de contrato, y ahí no hay deuda, por lo tanto no figuraría en el registro", acotó.
Si bien es un paso importante, afirmó, aún hace falta un registro especializado para el sector inmobiliario.
Sector privado
"La investigación no solo se debe limitar a evaluar la capacidad de pago del futuro arrendatario, sino investigar su comportamiento social", señaló Mejorada.
El letrado recomienda buscar si la persona se encuentra en la lista de Infocorp. "Cualquiera puede acceder, con el nombre del inquilino. Es el recurso más efectivo en términos de una información confiable", explicó.
Otra opción es nombrar a un fiador o garante. Es decir, una persona de mutua confianza que pueda certificar que el futuro inquilino no va a generar algún tipo de problema.
Incluso existen las listas especializadas. Inquilinos Morosos ofrece un registro de deudores en el sector, pero para acceder al servicio se debe pagar.
En cuanto a su conducta, el motor más fácil para obtener datos es Google. En el buscador se pueden hallar noticias o información que involucren a la persona. La otra opción es la red social Facebook.
Otros recursos
El seguro más fácil que tienen los arrendadores ante una eventual deuda es la garantía. Si bien es cierto que no existe una ley que determine cuántos meses de adelanto se debe entregar, lo usual son tres meses de alquiler.
Pero, dependiendo de la naturaleza del alquiler, se pueden pedir más meses. "Si tienes en frente una persona totalmente desconocida, que no tiene trabajo, que no tiene bienes, nada en lo que puedas encontrar un respaldo, le pedirás más garantías".
Otro recurso que puede ahorrarle bastantes problemas es la cláusula de allanamiento anticipado.
Si el arrendatario no paga el alquiler, lo normal es utilizar el dinero de la garantía. Pero si se agota y sigue sin pagar, es natural que el dueño del inmueble quiera retirar a los inquilinos.
Aquí viene el problema, pues comenzaría un juicio de desalojo. "Este juicio es muy largo, puede tomar dos años", añadió. Es decir, durante dos años no va a percibir dinero por el alquiler del inmueble.
Mejorada recomienda incluir en el contrato esta cláusula, que "permite que una vez vencido el plazo o que si no te paga y terminas el contrato anticipadamente, lo puedes sacar más rápido que la forma ordinaria".
Si bien el retiro del inquilino no será inmediato, el abogado estima que el proceso puede acortarse a solo unos seis meses.