Gerentes de casas de bolsa, AFP, aseguradoras, fondos y gestores de inversión ofrecen sus recomendaciones para el 2022. Por unanimidad señalan que la inversión en acciones de EE.UU. será la mejor alternativa frente a un contexto de inflación y subida de tasas de interés. Prevén que el ruido político interno continuará afectando los activos del mercado local y limitará su crecimiento. Por consenso, los expertos aconsejan hacer las inversiones en dólares pues el sol podría seguir débil por la incertidumbre.
Además, ven al sector de bienes raíces como una buena opción frente a la inflación global y local; y para los más tolerantes al riesgo aconsejan la inversión en criptomonedas. Asimismo, coinciden en que una mínima parte debe quedar en cash para cubrir los gastos de corto plazo y aprovechar oportunidades.
- ¿Cuáles serán las mejores alternativas de inversión en el 2022?
- ¿Cómo debería conformar su portafolio un peruano promedio?
- ¿Se debe invertir en dólares o soles?
- ¿Qué otras opciones de inversión serán aconsejables para las personas este año?
José Martínez, vicepresidente ejecutivo de Inversiones de Rimac Seguros
- Las mejores alternativas son los activos reales, aquellos protegidos contra la inflación, como participaciones patrimoniales o en acciones de empresas privadas. En el 2021, las acciones tuvieron retornos particularmente elevados, pero este año serían más bajos. Aun así, van a superar los resultados esperados en renta fija. Hay que ser cuidadoso en escoger los sectores. La subida de valor se concentró en acciones de las grandes empresas tecnológicas del mundo y ahora probablemente los sectores más atractivos se encuentran en financieras de EE.UU., respaldadas por la subida de tasas de interés. La tendencia alcista de las materias primas, impulsadas por el crecimiento económico global, tiene para varios años más. También, acciones de empresas petroleras relacionadas con la matriz energética, cobre, litio, níquel y aluminio.
- La mayoría de inversionistas locales tiene una aversión al riesgo elevada, así que deberían tener un portafolio conservador. Un 60% en acciones de altos dividendos, infraestructura y bienes raíces; el otro 40% en renta fija concentrada en bonos con una duración mayor a cinco años y con grado de inversión o BBB.
- El sol cotiza con una prima por riesgo político que seguirá hasta que se resuelvan estos problemas. Cuando se alcance una estabilidad, lo más probable es que el sol se aprecie.
- Acciones de empresas que invierten en proyectos de infraestructura, de transporte, de abastecimiento eléctrico, distribución de gas natural, generación de energía eléctrica, eólica y solar.
Alberto Arispe, gerente general de Kallpa SAB
- A las personas que les gusta más el riesgo, sugerimos acciones de EE.UU. (Wall Street), en los sectores tecnológico, e-commerce, salud, biotecnología y financieras. También, acciones de China, que está muy golpeada y podría rebotar. La renta fija (bonos y otros títulos de deuda) sufrirá por la subida de tasas de interés, pero si le agrada al inversionista se recomienda buy and hold (comprar y esperar); bonos que rinden 5% anual son una buena opción.
- A quien toma un riesgo moderado le recomendaría tener un 5% de su portafolio en caja, 45% en fondos diversificados de acciones de grandes empresas estadounidenses, con buenos flujos de caja y proyección de crecimiento en los siguientes años, y 50% en papeles de empresas sólidas de bajo riesgo.
- Este 2022 no le iría tan bien a la economía peruana, por lo que el sol continuaría depreciándose. Recomiendo poca inversión en Perú, tener solo el 5% en soles o lo necesario para vivir y 95% en dólares, en activos de empresas que cotizan en bolsas extranjeras. No veo buenas perspectivas para Perú este año: bajas tasas de crecimiento, mucho ruido político, poca confianza del mercado en el Gobierno.
- Se debe diversificar, no tener los huevos en una misma canasta. Alternativas como ETF con mayor participación en EE.UU.; el SPY y QQQ, que replican los índices S&P500 y Nasdaq, con exposición a compañías sólidas.
Óscar Corpancho, gerente de Renta Variable de Prima AFP
- El mundo está recuperándose de la pandemia. Los estímulos globales fueron tan grandes que lograron estabilizar al sector corporativo para afrontar la crisis. Las compañías demostraron una resistencia muy importante que se vio en los activos de riesgo, y se observará en las utilidades que se esperan. En el 2022, los activos de riesgo serán los de mayores retornos. Los bonos tendrían una rentabilidad más acotada y las monedas de economías emergentes, mejores retornos que el dólar.
- Un portafolio de 60% en acciones y 40% en bonos con riesgo y de corto plazo sería positivo para un peruano promedio. Tener más participación en monedas emergentes, salvo de China, y parte en moneda dura como euros. No tiene mucho sentido tener caja. Las tasas de interés son bajas en términos nominales y, ajustadas por inflación, probablemente sean negativas.
- El sol está muy desviado de su valor fundamental a causa de la preocupación de los inversionistas por lo que podría pasar en Perú. La dinámica en monedas va a depender mucho de la política de Estado. Si el inversionista quiere mayor cobertura frente a la incertidumbre puede mantener más dólares en su cartera.
- Los activos que más pueden sorprender ese año son los que tienen correlación positiva con la inflación global. El oro, por ejemplo, no es una cobertura perfecta pero sí positiva.
Jorge Ramos, gerente general de BBVA Bolsa
- Las mejores alternativas serán las que rindan por encima de la inflación. Las acciones vinculadas al crecimiento económico, de entretenimiento y financieras deben revaluarse, sin dejar de lado acciones tecnológicas de empresas más consolidadas. Geográficamente, hay que situarse en EE.UU. y Europa. También, una opción son los bonos de corto plazo que permitan migrar a papeles con mejores tasas cuando estas suban y que funcionan como hedge (cobertura) ante la incertidumbre. Se debe considerar, asimismo, Fibras o Reits, productos estructurados como depósitos con subyacentes indexados a la inflación. Será un año de estabilización económica tras un proceso inflacionario.
- Un cartera diversificada que funcione bien tendría un 50% en acciones, 20% en real estate, 25% en activos defensivos como depósitos a plazo, metales preciosos o bonos de corto plazo, y 5% en caja.
- En soles, un 30% para gastos de corto plazo, y 70% en dólares para los de largo plazo. Ante el aumento de tasas en EE.UU. el inversionista querrá subir su participación en activos de este país, lo que tendrá un efecto a favor del dólar. En la economía peruana, el sol también se perjudica por el ruido político.
- Hay oportunidad en sectores nuevos, como inteligencia artificial, economía virtual y metaverso. Incluso las criptomonedas podrían generar rendimientos importantes en el largo plazo.
Luciana Bonifaz, Head de Inversiones y Research de Independiente SAF
- En el 2022, probablemente continuarán las presiones inflacionarias y, con ello, vendrán mayores tasas de interés en el mundo. Así, van a destacar aquellas empresas que logren generar eficiencias necesarias para afrontar esta subida de precios y el encarecimiento del crédito a nivel global. Estas son las compañías estadounidenses, por lo que las mejores alternativas serán las acciones de estas empresas líderes en el mundo, que generan mayor productividad en el tiempo.
- La cartera debe ser una mezcla conservadora de instrumentos eficientes y líquidos, con bonos de la mejor calidad y acciones de las principales empresas de EE.UU. Asignar un 65% a papeles de deuda, 30% a acciones y ETF, y 5% a cash.
- Recomiendo un portafolio en dólares al 100%. Todos los ahorros o dinero que no se utiliza para gastos corrientes deberían estar en una moneda segura como la estadounidense para que el dinero no pierda valor en el tiempo.
- En un mundo con presiones inflacionarias aún en el presente año, en donde los grandes espacios familiares son más valorados por la pandemia y en el que las tasas de interés, si bien van a aumentar, continúan siendo bajas respecto de su valor histórico, el mercado inmobiliario o real estate en Estados Unidos será muy favorecido, sobre todo tratándose de una economía en donde las instituciones funcionan y las reglas de juego son claras.
Eduardo Leciñana, wealth manager de Seminario SAB
- La experiencia nos enseña que la economía global es cada vez más antifrágil, capaz de gestionar retos que se presentan y recuperarse de ello. La renta variable de EE.UU. seguirá alcista, pero con ganancias moderadas frente al 2021. Sugiero los ETF SPY y QQQ. De la misma forma, recomiendo el Global Stocks mediante el ETF del VT, o Developed Markets con el ETF del VEA. La valorización de acciones del mercado local y regional es muy atractiva (precios), pero no espero un comportamiento alcista este año.
- No existe la receta única, cada inversionista es un mundo, tiene sus propias realidades, tolerancia o aversión al riesgo, plazos y necesidades de liquidez. Pero se debe tener claro el proceso de inversión, hacerlo con visión de largo plazo, paciencia y expectativas realistas.
- Se observa una presión por el lado de la oferta de activos peruanos. Distintos elementos políticos, sociales y económicos están dañando las expectativas y confianza de los agentes económicos. Así, hay que sobreponderar la inversión en dólares. Nuestra moneda seguirá vulnerable a factores locales.
- Agregaría como cobertura frente a la inflación los ETF sobre el oro y plata, como GLD y SLV, respectivamente. Bitcóin puede ser una opción para los más tolerantes al riesgo y no permanecer en cash, salvo que sea para buscar oportunidades de inversión.
Carlos Rojas, CEO de Capia SAFI
- Este año tendrá dos partes: una muy parecida al 2021, con acciones subiendo, bonos cayendo un poco, metales con precios arriba y un mundo recuperándose de la caída por la pandemia. La segunda, con una apertura total de economía que beneficiará a sectores como turismo, educación, restaurantes, aviación y hotelería. Las acciones de los sectores petrolero y minero también seguirán muy demandados, mientras que las de empresas tecnológicas ya crecieron mucho el año previo. Bonos de corto plazo, pues los papeles mayores a cuatro años sufrirán el golpe de la subida de tasas de interés del 2022. La elevada inflación afecta la preferencia por depósitos a plazo o ahorros.
- Una cartera con 35% en renta fija (factoring, confirming, leasing y deuda privada de corto plazo); 10% en fibras, cuyo precio bajó en el mercado; 35% en acciones; 15% en real estate, y 5% de cash para oportunidades muy buenas. Este año será de mucha volatilidad por varios cambios estructurales, quien tenga el estómago para asumir riesgo que apueste por acciones.
- Un 50% en cada moneda. El dólar subió mucho en el 2021 y debería regresar a sus niveles prepandemia.
- Una alternativa que no es para todos, sino para aquellos que cuentan con excedentes y un horizonte de inversión superior a 10 años, es el venture capital en Latinoamérica. También incluiría criptomonedas en el portafolio.
Paul Rebolledo, CEO de Tandem Finance
- Los mercados se siguen beneficiando de mejoras en índices accionarios internacionales, como los de EE.UU. Europa y mercados emergentes. Se prevé utilidades robustas en los corporativos y se debe ser selectivo en la compra de acciones, escoger empresas y sectores con fundamento, como tecnológicos, farmacéuticas y de demanda interna. El aumento en la tasa de referencia del Banco Central de Reserva (BCR) generará tasas de interés más atractivas para las entidades financieras este año.
- El peruano promedio es conservador, trata de evitar vaivenes bruscos en sus inversiones. En tal sentido, asignaría un 20% a depósitos a plazos en moneda local y exterior, 30% a bonos corporativos de demanda interna, 20% a fondos de inversión privados de operaciones de factoring, comercio exterior y renta inmobiliaria, y 30% a fondos mutuos o fondo de fondos de acciones internacionales.
- Seguir manteniendo dólares como posición defensiva ante el ruido político local, pues continuará la apreciación del dólar frente al sol.
- Otra opción son los activos alternativos. El real estate internacional es una buena fuente de renta periódica. Los de menor aversión al riesgo podrían ir por criptomonedas, que cada vez tienen mayor acogida en el público minorista; el inversionista puede entrar a probar con montos limitados en este asset class que tiene volatilidad elevada.