Ahora que los primeros dispositivos 5G están llegando al mercado estadounidense, Apple Inc. está bajo más presión para comenzar a preparar un iPhone comparable o ver un ataque a su dominio.
Motorola Mobility Holdings ya tiene un teléfono cuasi 5G –requiere un módulo de conexión– y Samsung Electronics Co. comenzará a vender su propia versión a través de Verizon Communications Inc. el 18 de abril. LG Electronics Inc. planea lanzar un teléfono en Sprint Corp. "muy pronto" y está intentando acelerar el lanzamiento de un modelo para Verizon, con el objetivo de capitalizar el frenesí que rodea a la tecnología de red ultrarrápida.
De hecho, todos los grandes vendedores de teléfonos en Estados Unidos han mostrado, anunciado o lanzado dispositivos 5G. Todos excepto Apple, el líder de la industria que representa casi la mitad de los envíos de teléfonos inteligentes en Estados Unidos. No se espera que la compañía lance un iPhone compatible este año, y ni siquiera es seguro para el 2020.
"Probablemente puedan arreglárselas en el 2019 sin un teléfono 5G", asegura el consultor de la industria inalámbrica Chetan Sharma. “Pero en el 2020, si no tienen un teléfono 5G, podría afectar su participación en el mercado, no solo en Estados Unidos, sino también en otros mercados".
Es difícil calcular el riesgo para Apple si se retrasa en la carrera 5G. La compañía navegó sin problemas las transiciones relativamente tardías a 3G y 4G, aunque eso fue cuando el iPhone todavía era novedad.
Las redes 5G también tienen que ser construidas, y las señales inalámbricas son propensas a la interferencia. No es seguro que los consumidores adopten la 5G para 2020, independientemente de lo que haga Apple. Los primeros teléfonos 5G serán potencialmente más caros y más grandes que algunos de sus homólogos más lentos, un inconveniente a corto plazo para la tecnología.
Para complicar las cosas, Apple se encuentra en una amarga batalla legal con Qualcomm Inc., el mayor fabricante de chips 5G. La compañía ha desafiado las prácticas de concesión de licencias de patentes de Qualcomm, y el caso será presentado ante un jurado en San Diego a finales de este mes.
La necesidad de chips 5G puede dar a Apple una razón para resolver rápidamente el caso, dijo Sharma. Apple actualmente trabaja con el fabricante de chips Intel Corp., que no espera poder vender componentes 5G a escala hasta el 2020. Si Apple se mantiene con ese proveedor, es posible que no saque un teléfono al mercado hasta el 2020 o incluso 2021, según Jeff Fieldhack, director de investigación de Counterpoint Technology Market Research.
La compañía también podría desarrollar algo internamente: los anuncios de empleo recientes insinúan que Apple podría estar desarrollando su propio chip 5G. Pero ese enfoque puede ser más desafiante. Apple, con sede en Cupertino, California, declinó hacer comentarios.
Qualcomm dice que está dispuesto a trabajar con Apple en 5G.
"Si somos líderes en 5G, y las compañías de teléfonos inteligentes, incluida Apple, quieren ser líderes en la era 5G, estarán interesadas en trabajar con Qualcomm", dijo Cristiano Amon, presidente del fabricante de chips, en una entrevista.
Los rivales de Apple en el mercado de teléfonos inteligentes no pierden tiempo. "Esta es una oportunidad de oro para nosotros", dijo en una entrevista Yasser Nafei, vicepresidente senior de LG.
LG había planeado originalmente lanzar un teléfono 5G en la red de Verizon en la segunda mitad del año, pero ahora está tratando de acelerarlo, dijo Nafei.
Motorola también está pisando el acelerador, afirma Doug Michau, director ejecutivo de operaciones de productos de Norteamérica.
"Hay algunos adoptadores tempranos que realmente quieren un dispositivo 5G, así que creo que podríamos ver algunas ganancias de participación de mercado", dice Michau.
En total, unos 30 dispositivos con 5G están listos para funcionar en todo el mundo. Esa es una transición mucho más rápida que la que se vio con 4G, asegura Amon de Qualcomm.
"Por primera vez, los dispositivos van por delante de la red", dijo Amon.
El enfoque lento de Apple podría poner a prueba la lealtad de los usuarios. Actualmente, al menos el 90% de los usuarios de iOS de Apple tienden a actualizarse a otro producto de Apple, pero la falta de un teléfono 5G "podría duplicar la cantidad de personas que cambian de iOS a Android", afirma Fieldhack.
"Eso sería muy preocupante para Apple porque el mercado estadounidense ya no está creciendo", dijo.
Para los consumidores, esta maniobra entre los proveedores de teléfonos móviles podría ayudar a bajar los precios. En un periodo de 12 a 18 meses, un dispositivo 5G debería costar alrededor de US$ 750 o incluso menos, lo que lo convierte en un producto para el mercado masivo, cree Nafei de LG.
La pregunta más grande es cuán útiles serán los teléfonos. Durante los próximos meses, los dispositivos para la red de Verizon solo podrán usar los servicios 5G en bloques seleccionados de ciudades seleccionadas. Se navegará en 4G el resto del tiempo.
"Pasarán años antes de que los operadores hayan actualizado sus redes hasta el punto en que tener un teléfono 5G supondrá una gran diferencia en la experiencia del usuario", asegura Craig Moffett, socio fundador de Moffettnathanson LLC.
Aun así, las personas que quieran descargar rápidamente una gran presentación o jugar un juego móvil de primera podrán ver las ventajas de 5G.
Puede que Apple no sea castigado por esperar. A menudo, la compañía no es la primera en adoptar nuevas tecnologías, pero se le atribuye la adición de características de una manera más elegante y fácil para el consumidor.
Por ahora, los fabricantes de teléfonos están luchando por el derecho a presumir. Esperan que ganar reputación por la última tecnología les ayude a vender más productos más adelante.
"¿Cuáles son nuestras oportunidades para resurgir y ser percibidos como la mejor compañía del mundo?", pregunta Nafei. "Pensamos en 5G como algo que nos ayudaría a restaurar esa posición".