De cara al próximo año, la legislación laboral exigirá a las organizaciones adaptarse a un entorno cada vez más demandante, priorizando temas como la inclusión, la seguridad y la contratación responsable.
“En el 2025, la implementación de una planificación estratégica será esencial para anticipar y mitigar riesgos, garantizando que las organizaciones estén bien preparadas para cualquier fiscalización y puedan operar de manera eficiente y conforme a la normativa”, explica Jaime Cuzquén, Associate Partner del Área Laboral de EY Perú.
En línea con ello, EY Perú comparte algunas recomendaciones esenciales para los empleadores para este 2025:
1. Garantizar la cuota de discapacidad: Para ello, es esencial que las empresas puedan acreditar debidamente el cumplimiento de la contratación de personal que cumpla con la cuota, o justificar el no cumplimiento con alguna excepción prevista en la legislación, según sea el caso.
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La ley establece que las empresas del sector privado que cuentan con más de 50 trabajadores deben contratar personas con discapacidad en una proporción no menor al 3% de la totalidad de su personal, mientras que las entidades públicas en su totalidad deben contratar a este personal en una proporción no menor al 5%.
2. Contar con un sistema de Seguridad y Salud en el trabajo (SST): Con el objetivo de implementar una gestión que sea eficaz para prevenir accidentes de trabajo y enfermedades ocupacionales, lo que implica mantener una supervisión periódica y conocer el nivel de cumplimiento de las empresas contratistas.
Cada 15 segundos 153 trabajadores sufren un accidente laboral, según el Ministerio del Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE). Por ello, es recomendable aplicar las normas de seguridad y salud en el trabajo para mitigar los riesgos laborales. Además, las infracciones consideradas como muy graves en relación con la Seguridad y Salud en el Trabajo (SST) se pueden penalizar con multas que oscilarían entre S/ 20,316.75 hasta S/ 405,794.25 dependiendo del número de trabajadores afectados.
3. Tomar en cuenta las modalidades de contratación: Cuando se contrata personal, es fundamental verificar la mejor modalidad de contratación (plazo fijo o plazo indeterminado) y las cláusulas idóneas para asegurar el ejercicio de las facultades como empleador. Esto será muy importante, por ejemplo, en caso de alguna disputa con el trabajador sobre la materia, que pueda derivar en una posterior sustentación frente a las autoridades.
4. Conocer la legislación en cuanto a tercerización de servicios: Además de tener que verificar que los contratistas cumplan con los requisitos legales para asegurar la validez del proceso, es necesario que los empleadores puedan mantenerse informados durante el año de las iniciativas legales y fallos judiciales que puedan generar cambios en el actual esquema de tercerización de procesos.
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5. Prevenir asuntos sindicales: Una buena planificación de cara al próximo año requiere identificar los puntos débiles que pueden generar reclamos o acciones sindicales. Por ello, los empleadores deben estar preparados para enfrentar negociaciones difíciles con el sindicato, las cuales puede que demanden un perfil más técnico y una mirada abierta a la situación de la industria y la economía del país.
6. Prepararse para las inspecciones laborales: Es importante que toda empresa potencie a su equipo de atención de inspecciones, principalmente en la etapa de investigación. Para lograrlo, es fundamental conocer los antecedentes y criterios del Tribunal de Fiscalización Laboral sobre la materia fiscalizada y sobre el debido procedimiento.
7. Definir una estrategia para enfrentar litigios laborales: En caso de un litigio laboral, es importante definir la estrategia de defensa sobre la base de la jurisprudencia vinculante y en función del impacto económico y reputacional que este pueda generar. Asimismo, en caso convenga, se recomienda acelerar la conclusión de los litigios a través de fórmulas conciliatorias.
8. Preparase en caso de una fiscalización tributaria laboral: En caso de una fiscalización tributaria laboral, será fundamental que las compañías identifiquen el actual tratamiento laboral y tributario que tienen los conceptos pagados en planilla y que puedan desarrollar políticas internas que permitan asegurar la deducibilidad del gasto de personal.
“Enfrentar los desafíos laborales del 2025 requiere de una planificación y gestión proactiva. Las empresas que adopten estas consideraciones no solo cumplirán con la normativa vigente, sino que también crearán un entorno de trabajo más inclusivo, seguro y eficiente. En EY Perú, estamos dedicados a apoyar a los empleadores en este camino, asegurando que estén preparados para un futuro laboral más exigente y competitivo”, finaliza Cuzquén.
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