Acorralado por las sanciones occidentales contra Rusia, el fabricante francés de automóviles Renault confirmó que vendió sus activos en ese país al Estado ruso, en la primera nacionalización de importancia desde la ofensiva de Moscú en Ucrania.
Renault indicó en un comunicado que cedió su participación mayoritaria (67.69%) en AvtoVAZ, el mayor fabricante de coches Lada en Rusia, a NAMI, el Instituto ruso de Investigación y Desarrollo de Automóviles y Motores.
Gracias a AvtoVAZ, Rusia fue el año pasado el segundo mercado del Grupo Renault, por detrás de Europa, con cerca de medio millón de vehículos vendidos.
No se dieron a conocer los detalles financieros, pero el ministro ruso de Industria y Comercio, Denis Manturov, dijo en abril que Renault planeaba vender sus activos rusos por “un rublo simbólico”.
“Se firmaron acuerdos sobre la transferencia de los activos rusos del Grupo Renault a la Federación Rusa y al gobierno de Moscú”, dijo el ministerio en un comunicado.
El grupo automovilístico francés también cedió a la ciudad de Moscú las operaciones de Renault en Rusia, incluyendo la planta cerca de la capital que producía vehículos de esa marca y Nissan.
El alcalde Serguéi Sobianin anunció que la fábrica va a relanzar la marca soviética Moskvich.
La dirección de Renault ya había anunciado que iba a incluir en sus cuentas del primer semestre una carga de 2,200 millones de euros (unos US$ 2,300 millones) a raíz de esta venta.
Reactivación de Lada
Renault se había comprometido con Avtovaz en el 2008 para convertirse en accionista mayoritario en el 2014 bajo la dirección de Carlos Ghosn.
En aquel momento, el gigante francés logró enderezar el barco del grupo ruso, cuyo accionariado compartía con el conglomerado militar-industrial de ese país Rostec.
Luego de fuertes inversiones, y la transferencia de tecnología con Dacia, la marca económica de Renault, Avtovaz comenzaba a dar ganancias.
Bajo los acuerdos firmados el lunes, Renault mantiene la posibilidad de volver a adquirir la filial rusa durante seis años.
“Hoy hemos tomado una decisión difícil pero necesaria; y estamos haciendo una elección responsable hacia nuestros 4,000 empleados en Rusia, preservando al mismo tiempo el rendimiento del Grupo y nuestra capacidad de volver al país en el futuro, en un contexto diferente”, dijo el director general de Renault, Luca de Meo, en un comunicado.
Avtovaz produce vehículos en su gigantesca planta de Togliatti (sudoeste, sobre el río Volga), que emplea a 35,000 personas.
Pero el mercado ruso se desplomó en el contexto del conflicto en Ucrania, y las fábricas del grupo funcionaban a media máquina, o en algunos casos directamente no lo hacían, a raíz de la escasez de componentes tras la imposición de sanciones occidentales contra Rusia.
Ante esta situación, Avtovaz tuvo que dar vacaciones pagas a sus empleados durante tres semanas en abril, deteniendo la mayor parte de su producción.
El sindicato del grupo anunció el 12 de mayo el cierre de las cadenas de producción del 16 al 20 de mayo, por la falta de componentes.