"El verano pasado pasé seis meses en Europa y me encantó tanto que planeé hacerlo todos los años, pero eso ya no sería posible", dijo Beth Sands, una nutricionista y contadora de 35 años que se mudó a Portugal en septiembre. "Tan pronto como ocurrió el Brexit, busqué en Google todas las formas en que podía obtener la ciudadanía europea". (Foto: REUTERS/Hannibal Hanschke)
"El verano pasado pasé seis meses en Europa y me encantó tanto que planeé hacerlo todos los años, pero eso ya no sería posible", dijo Beth Sands, una nutricionista y contadora de 35 años que se mudó a Portugal en septiembre. "Tan pronto como ocurrió el Brexit, busqué en Google todas las formas en que podía obtener la ciudadanía europea". (Foto: REUTERS/Hannibal Hanschke)

En octubre Michelle Jones y su esposo Gary abordaron un ferry en Inglaterra para establecerse en España. Si se hubieran ido después de que finalizara el periodo de transición para que salga de la , las cosas habrían sido mucho más complicadas.

“No tenemos alternativa, es ahora o nunca”, dijo la ex trabajadora de una asociación inmobiliaria en una peluquería en la ciudad turística de Fuengirola, en el sur de España.

“Nuestra familia y amigos en piensan que estamos locos por hacer esto durante una pandemia”, dijo Jones, de 54 años, pero “no vamos a pasar por el embrollo de tratar de obtener visas o cosas como esa”.

Reino Unido dejó formalmente la Unión Europea (UE) el 31 de enero después del referendo del 2016, pero desde entonces ha estado en un periodo de transición bajo el cual permanecen sin cambios el libre desplazamiento y el comercio. Ese periodo termina el 31 de diciembre.

Catorce naciones de Europa, entre ellas Portugal y España, concederán a los británicos que lleguen antes del 31 de diciembre el derecho a quedarse. Otros países tienen requerimientos más difíciles, ya que pedirán a todos los británicos que vuelvan a someterse al procedimiento de visado una vez que la transición termine.

Antes del plazo, algunas personas han adelantado planes de jubilación y otras han aprovechado la posibilidad de trabajar desde casa para mudarse.

“El verano pasado pasé seis meses en Europa y me encantó tanto que planeé hacerlo todos los años, pero eso ya no sería posible”, dijo Beth Sands, una nutricionista y contadora de 35 años que se mudó a Portugal en septiembre. “Tan pronto como ocurrió el Brexit, busqué en Google todas las formas en que podía obtener la ciudadanía europea”.

Aquellos que lo dejaron para el último minuto vieron frustrados sus planes por el anuncio de Portugal el domingo por la noche de que cerraría las fronteras a los viajeros del Reino Unido que aún no estaban registrados como residentes desde el lunes, en respuesta a la nueva cepa del virus súper infecciosa detectada en Reino Unido.

“Se suponía que iba a llegar el 26 de diciembre. No va a suceder ahora antes del Brexit”, publicó un usuario de Facebook en un grupo de la red social para británicos en Portugal, a última hora del domingo.

Una visa para Europa

En la ciudad turística española de Benidorm, la corredora de seguros Sophie Goode dice que organizó más de las pólizas que muchas personas necesitan para respaldar sus solicitudes de residencia en noviembre que el resto del año combinado.

“Algunas personas me han llamado desde el aeropuerto diciendo ‘Estamos aquí, tenemos que hacer el papeleo’”, dijo Goode.

Los registros de residencia en Portugal y España se han disparado en línea con los plazos del Brexit.

En Portugal, 1,453 personas, más del doble del récord anterior de registros mensuales, se inscribieron para obtener la residencia en marzo del 2019, la fecha en que Gran Bretaña originalmente debía abandonar la Unión Europea. Los datos provisionales de noviembre muestran que la cifra fue de 2,407.

En España, el número de británicos con permiso de residencia aumentó 8.2% de junio del 2018 al 2019 y otro 5.8% hasta junio del 2020, totalizando 366,498 personas, según datos de la página web de la secretaría de Estado de Migración.