Funcionarios de la Administración Biden dicen que comienzan a ver signos de alivio para la escasez mundial de de semiconductores, incluidos compromisos de parte de los fabricantes para producir más chips para las compañías automotrices que han tenido que interrumpir su producción.
La secretaria de Comercio de Estados Unidos, Gina Raimondo, quien ha liderado los esfuerzos del presidente Joe Biden en el suministro de chips, negoció una serie de reuniones entre los fabricantes de semiconductores, sus proveedores y sus clientes, incluidos los fabricantes automotrices. Altos funcionarios de la Administración aseguran que dicha reuniones ayudaron a aliviar la desconfianza entre las partes relacionadas con la producción y asignación de los fabricantes de chips y los pedidos de los fabricantes de automóviles.
El resultado ha sido una mayor transparencia en relación a la producción y los envíos de los fabricantes, además de un aumento gradual en la oferta para la industria automotriz, dijo Raimondo en una entrevista. La Administración también ha presionado en los últimos días a los Gobiernos de Malasia y Vietnam para que garanticen que las plantas de semiconductores se considerarán negocios “críticos”, de modo que mantengan su ritmo de producción aun con los recientes brotes de COVID-19, dijeron las autoridades.
“Están empezando a ver algunas mejoras”, dijo Raimondo, y agregó que en las últimas semanas, el director ejecutivo de Ford Motor Co., Jim Farley, y la directora ejecutiva de General Motors Co., María Barra, le han dicho que “están empezando a recibir un poco un poco más de lo que necesitan” y que la situación es “ligeramente mejor”.
Un análisis de Goldman Sachs publicado el mes pasado señaló que el impacto máximo de la escasez de chips se produjo en el segundo trimestre y que la producción de automóviles “debería aumentar en julio”. Sin embargo, los fabricantes de automóviles estadounidenses continúan luchando con la escasez, que se estima que le está costando US$110,000 millones a la industria.
Ford redujo o cerró la producción en ocho plantas este mes, incluida la que fabrica su nueva versión del icónico vehículo utilitario deportivo Bronco. Cinco de las plantas de GM en Norteamérica experimentarán un “tiempo de inactividad” debido a los “ajustes de producción de semiconductores” este mes y en agosto, según el portavoz de GM, David Barnas.
Mientras tanto, decenas de miles de autos nuevos permanecen en lotes fuera de las fábricas estadounidenses, esperando los chips que alimentan sus computadoras a bordo.
Una portavoz de Ford se negó a comentar. Barnas confirmó la conversación de Barra con Raimondo y proporcionó un comunicado que la compañía emitió el 15 de julio.
“Los equipos de fabricación, ingeniería y cadena de suministro y compras globales de GM continúan encontrando soluciones creativas y avanzan a pasos agigantados trabajando con la base de suministro para maximizar la producción de nuestros vehículos de mayor demanda y con capacidad limitada, incluidos camiones de tamaño completo y SUV para nuestros clientes”, dice el comunicado.
La escasez de semiconductores es anterior a la Administración de Biden, pero surgió como una crisis para el nuevo presidente a principios de este año, cuando los fabricantes de automóviles estadounidenses se vieron obligados a comenzar a reducir la producción por falta de chips. La fabricación de semiconductores se concentra en un par de empresas asiáticas, Taiwan Semiconductor Manufacturing Co. y Samsung Electronics Co. Ltd.