Las prohibiciones generales de viajar no evitarán la propagación de la nueva variante ómicron del coronavirus, advirtió el martes la OMS, que recomendó a los mayores de 60 años que aplacen sus viajes.
En sus recomendaciones, la Organización Mundial de la Salud señaló que, hasta el 28 de noviembre, “56 países habían aplicado medidas de viaje para intentar retrasar la importación de la nueva variante”.
Sin embargo, la organización con sede en Ginebra, cuyas recomendaciones no siempre son seguidas por sus 194 Estados miembros, advirtió que “las prohibiciones generales de viajar no impedirán la propagación internacional, y suponen una pesada carga para las vidas y los medios de subsistencia”.
Además, estas medidas “pueden tener un impacto negativo en los esfuerzos sanitarios mundiales durante una pandemia al desanimar a los países a informar y compartir los datos epidemiológicos y de secuenciación”.
En sus recomendaciones la OMS dice que “se debe aconsejar a las personas que no tienen buena salud o que corren el riesgo de desarrollar una forma grave de la enfermedad COVID-19 o de morir, incluidas las de 60 años o más o las que tienen comorbilidades (por ejemplo, cardiopatías, cáncer y diabetes), que pospongan el viaje”.
En términos más generales, pide a todos los viajeros que “permanezcan atentos”, se vacunen y sigan las normas de salud pública independientemente de su estado de vacunación, incluido el uso de mascarillas, la observancia de medidas de distanciamiento físico y la evitación de espacios concurridos y mal ventilados.
El domingo pasado, la oficina regional de la OMS en África pidió “fronteras abiertas”, mientras que Sudáfrica solicitó el “levantamiento inmediato y urgente” de las restricciones de viaje al país tras la detección de la nueva variante ómicron.