El nuevo ministro de Economía de Alemania advirtió que el país no cumplirá sus objetivos climáticos y necesita intensificar los esfuerzos para lograrlo.
Las reducciones previstas de las emisiones de gases de efecto invernadero probablemente no se cumplirán el próximo año, y el 2023 también parece difícil, declaró Robert Habeck, quien además es colíder del partido de los Verdes, al semanario Die Zeit en una entrevista publicada el miércoles.
“Estamos comenzando con un déficit drástico”, dijo Habeck, quien sucedió a Peter Altmaier este mes.
Los cambios para combatir el cambio climático causarán trastornos y el país tendrá que prepararse para la frustración de los trabajadores de industrias como la minería del carbón, que se enfrentan a recortes en el cambio hacia fuentes de energía más limpias.
Alemania ha estado luchando por cumplir sus ambiciones de convertirse en un líder en la protección climática. La mayor economía de Europa ha ampliado la energía eólica y solar, pero sigue dependiendo en gran medida del carbón para alimentar sus vastas operaciones industriales.
La nueva coalición gobernante, formada por los socialdemócratas del Canciller Olaf Scholz, los Verdes y los proempresariales Demócratas Libres, ha prometido intensificar las medidas de lucha contra el cambio climático. Habeck reconoció que la salida de industrias como la minería del carbón está teniendo un costo para los empleados y las regiones afectadas.
“También habrá decepción y quizá enojo, no me hago ilusiones”, dijo Habeck, que también supervisa la política climática y energética. Pero sostuvo que las nuevas tecnologías crearán más puestos de trabajo. “No nos quedaremos sin trabajo, sino todo lo contrario”, dijo.