Tras la pandemia el sector servicios se viene recuperándose, pero todavía de manera tibia. En 2020 el sector cayó en 10.1%; en 2021 se recuperó y creció en 10.3%; mientras que en el 2022 solo creció 3.3%, ¿qué se espera para este año?
Omar Cárdenas, vicepresidente del gremio servicios de la Cámara de Comercio de Lima (CCL) dijo a Gestión que para el 2023 se espera un crecimiento de 2.3%.
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Según dijo, este sector servicios -que aportó con el 41.5% del PBI en el 2022- recién está superando complejidades que afectaron significativamente las inversiones que ingresaban a Perú.
“La estabilidad que hemos alcanzado en estos meses se verá reflejada en el dinamismo del comercio el siguiente año. Tenemos una dificultad para alcanzar cifras y estadísticasExiste cierta resistencia para levantar información estadística que nos indique un perfil de las exportaciones de servicios del Perú”, señaló.
Asimismo, dijo que hay un ecosistema en el cual todas las actividades económicas están interelacionadas al sector. Por un lado, en el país hay servicios que están vinculados a la exportación de bienes y manufactura; y por otro, está la exportación de servicios que van directamente a compradores en el extranjero.
“En este último rubro hemos tenido mayor dinamismo desde hace un tiempo; y todavía tenemos la posibilidad de expandir nuestra oferta en algunos rubros en los que somos expertos, pero que no han alcanzado unos niveles de competitividad significativos”, resaltó.
“En temas de consultoría vinculados a minería, pesca y medioambiente tenemos mucho espacio sobre cual trabajar (...) Otros donde sí hemos destacado y lo vemos año a año son en servicios vinculados a digitalización, animación, cinematografía, desarrollo de software y servicios de experiencia al cliente, lo que se llama contact center“, agregó.
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El representante gremial subrayó también que hay otros espacios donde hay actores en el Perú que tienen alto nivel de especialidad y que están buscando abrirse en el extranjero, por ejemplo, aquellos vinculados a la economía Naranja: grandes espectáculos, experiencias vinculadas a la creatividad y arte.
No obstante, reconoció que en Economía Naranja, aún hay temas que nos afectan para ser competitivos.
“Nuestra legislación es bastante rígida en cuanto al tema impositivo y en cuánto de provisión de facilidades para que vengan grandes artistas, ahí todavía hay que hacer cierto ajustes”.
“Podemos decir con certeza que los servicios vinculados a la tecnología, al posicionamiento de proveedores peruanos en materia de tecnología sí ha ido creciendo, es una tendencia positiva; a pesar de la pandemia y de las circunstancias política. Vemos que animación digital, desarrollo de software son rubros que tienen una presencia permanente ya en los mercados internacionales”, detalló.
Oportunidad en acuerdos comerciales
En otro momento, Cárdenas dijo que tenemos que considerar que el Perú tuvo una circunstancia particular en cuanto a su proceso de diversificación productiva; “enfrentarnos a mercados nuevos, que demandaban tanto bienes como servicios, nos costó un poco más que aquellos países que ya tenía procesos de liberalización previos; que se entiende como un Estado en el cual existe flexibilidad en materia laboral e impositiva. Les permite a los países acceder con mejores condiciones a los mercados internacionales”.
Así, mencionó que la poca flexibilidad que tuvo el Perú, sumado a la poca innovación y tecnología, provocó una brecha como para llenar una primera etapa, “pero se ha allanado bien el escenario y -ahora- el acceso a tecnología y la inversión ha permitido que podamos incorporarnos a nivel competitivo a otras economías que se habían adelantado, no solamente Chile, sino Colombia, que es un actor muy potente en materia de servicios porque es un país en el que hay voluntad política del Estado para promover la exportación de servicios”.
En esa línea, destacó que los acuerdos comerciales de Perú con otros países representan una oportunidad para seguir abriendo paso a proveedores de servicios peruanos. “Ya sea porque participa mucho más en ferias comerciales o porque participa gremialmente. Lo que vemos es una consolidación de la capacidad exportadora. Nos ayudaría mucho tener más información, con un apoyo estratégico del Estado, no para subsidiar comercio, sino más bien para que sea un socio estratégico en cuando a la facilitación comercial”.
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Ello significa, explicó, la suscripción de acuerdo para evitar la doble imposición, “de tal forma que el tema impositivo no sea una barrera, y unas políticas en materia de educación y comercio que nos pongan en un escenario más competitivo”.
“Necesitamos que nuestros estudiantes terminen el colegio hablando inglés; que tengan habilidades numéricas y ógicas, de forma que tengamos la capacidad de participar dinámicamente en el mercado internacional”, indicó.
Finalmente, Cárdenas señaló que a nivel global están notando que los países tratan de acercar más a desarrolladores de conocimiento para que se domicilien e instalen a entidades y personas que inviertan en innovación y tecnología. “Es algo que aún en el Perú no está ocurriendo, pero espero que en el mediano plazo lo vamos a ir viendo, en tanto se hace un cronograma para participar en la dinámica internacional”.
Exportación de servicios modernos
Un rubro en crecimiento. José Carlos Schroth, presidente del Comité de Servicios al Comercio Exterior de Adex, comentó a Gestión que la dinámica de las empresas de servicios basados en conocimientos (servicios modernos) mantuvo un crecimiento constante en los últimos años.
“Incluso en época de pandemia las exportaciones de los servicios modernos no mostraron decrecimientos como sí ocurrió en el sector de turismo y transporte”, resaltó.
Según detalló, el 2019 fue un año récord para el país en exportación de servicios modernos alcanzando los US$ 1,251 millones.
“Creo que para este año podremos igualar esa cifra y superando la del 2021 que fue de US$ 1,240 millones, pero internamente como país debemos realizar ajustes al sistema en coordinación con el Estado y la academia para mejorar nuestra competitividad respecto a otros países de la región y del mundo”, precisó.
En línea con Cárdenas, el representante del Comité de Servicios al Comercio Exterior de Adex dijo que se debe apoyar a las empresas peruanas para que puedan aprovechar las oportunidades comerciales que deriva de las firmas de los acuerdos comerciales. “Las empresas deben analizar las oportunidades que esos instrumentos nos brindan y nos acercan a mercados como Reino Unido, Australia y regionalmente para aumentar nuestra participación en donde ya tenemos presencia”.
Asimismo, propuso que se trabaje en una propuesta de proyecto -a fin de promover la exportación de servicios- que englobe aspectos como la renovación de nuestra ley, contar con listas de servicios que exige la industria 4.0 y potenciar al sector con recursos financieros para su escalabilidad.
Respecto a la demanda y oferta de profesionales en el sector, subrayó que las generaciones que vienen piensan en la digitalización de los sectores financieros, logísticos, del agro, educativos, minero, entre otros. “La industria TIC (análisis de big data, software, ciberseguridad, automatización de procesos, contenidos digitales) cobran gran relevancia y la academia cumple un rol clave en dicha etapa”, sostuvo.
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