Los centennials, el grupo etario de jóvenes nacidos después de 1995, no la ha pasado muy bien en los últimos años. La pandemia golpeó seriamente el desarrollo personal de esta generación, la primera de nativos digitales, afectando sus capacidades de relacionamiento y confianza.
Con esas secuelas, poco o nada se sabe de cuáles son sus propósitos, metas y características ahora que empiezan su vida laboral en el Perú.
El estudio “Generación Z: Descifrando las Preferencias de los Centennials en el Mundo Laboral”, realizado por el PAD Escuela de Dirección con Konecta, da luces al respecto. Gestión te cuenta cuáles son sus principales descubrimientos.
LEA TAMBIÉN: Centennials, la generación que prioriza los beneficios más que el salario
Perfil
Retener al talento joven de esta generación es todo un reto empresarial. Se trata de una población a la que la pandemia les ha dejado cicatrices, no físicas, sino psicológicas.
El estudio del PAD –que realizó test psicológicos a centennials de Lima y Chiclayo– señala que se trata de un grupo que sufre altos niveles de estrés por tener una economía distante de lo que ellos esperan obtener, que pasa por momentos de precariedad tanto en lo económico como en lo familiar, y tiende a distraerse con facilidad.
Asimismo, el 45.7% de los centennials limeños encuestados presenta síntomas de depresión y un 35.9% presenta una ansiedad mínima o moderada.
Otros resultados importantes del estudio son que el 70% de los centennials encuestados son responsables. Sin embargo, a la vez, menos del 40% presenta estabilidad emocional.
El tipo de familia de estos jóvenes es la variable diferencial para entender estos datos. Uno de los hallazgos más importantes del estudio es que existen centennials que, a pesar de su edad, ya ocupan cargos de liderazgo en sus organizaciones. Además, tenían características psicológicas dispares a la mayoría de los encuestados.
“Vimos que venían de familias de alta unidad familiar. En los sectores A y B es importante, pero si falla, tienes un barrio seguro o una escuela. En los segmentos vulnerables puede ser un escudo social ante las adversidades” explicó al respecto Antonio Velásquez, investigador asociado del PAD, durante la presentación del estudio a la que asistió Gestión.
En dicha exposición, Velásquez también indicó que los centennials peruanos presentan una baja afabilidad, lo que dificulta el trabajo en equipo. De igual forma uno de sus rasgos más fuertes es la extroversión, pero a nivel digital, a través de redes sociales como Instagram, antes que mano a mano, de acuerdo a la investigación.
¿Cómo trabajar con un centennial?
A partir de sus características, queda claro que para integrar a un centennial peruano a una organización es necesario plantear una serie de cambios para que se sienta cómodo en su trabajo.
“Es una generación muy diferente a las anteriores, busca que una empresa se adapte a uno, sino renuncia”, afirmó Velásquez sobre este grupo etario.
Por eso el estudio del PAD da algunas recomendaciones. La más importante es tener claro que los centennials necesitan una validación constante, es decir, esperan un reconocimiento por sus buenas labores y que sus opiniones sean tomadas en cuenta.
Además, necesitan explicaciones claras sobre su rol dentro de la organización. “A veces ellos se sienten ajenos a los indicadores, no solo porque no se les ha dicho claramente qué objetivos tienen, sino porque sus formas de aprendizaje son a través del juego. Ellos buscan recibir un premio a cambio del esfuerzo, no bonos, sino reconocimiento. Es parte de la teoría de la gamificación”, explicó Velásquez.
De igual forma el investigador recomienda a las empresas contar con áreas de experiencias o de innovación que se encarguen de instalar políticas transversales de relación comunitaria y reconocimiento al esfuerzo dentro de la organización.
“La idea es que una empresa con labores altamente estresantes tengan equipos que sistematicen ejemplos de reforzamiento. Si el jefe está orientando a un colaborador, dándole gratificaciones a cambio, esa experiencia no puede quedarse en solo una persona, la idea es ver cómo transferirla al resto”, detalló.
Según señaló Alejandro Fontana, profesor e investigador del PAD, todos estos indicadores son bastante importantes para el empresariado peruano porque hasta ahora no tenían una referencia local para entender a los centennials.
“Muchas veces las empresas o instituciones guían sus políticas o programas por perfiles de jóvenes que han sido construidos en otros países, y nuestra realidad es muy distinta. Ante la falta de información, fue instintivo ir a la fuente primaria: los jóvenes que trabajan”, comentó en la presentación de la investigación.
LEA TAMBIÉN: Empleo mundial 2023: Los 10 trabajos más y menos demandados.
¡Beneficios ilimitados con tu suscripción a Gestión! Disfruta de hasta 70% de dscto. en más de 300 promociones del Club de Suscriptores, que además podrás usar todas las veces que quieras. Conócelos aquí. ¿Aún no eres suscriptor?, adquiere tu plan aquí.