La revolución digital y los cambios tecnológicos a los que nos enfrentamos en la actualidad, ha hecho que numerosas empresas estén en constante innovación y respondan a las exigencias que está demandando el mercado. En ese sentido, las organizaciones apuestan por una transformación digital en la que terminan por desarrollar meteorologías ágiles dentro de sus diferentes áreas. Pero, ¿qué son exactamente las metodologías ágiles?
Por definición, las metodologías ágiles son aquellas que permiten adaptar la forma de trabajo a las condiciones del proyecto, consiguiendo flexibilidad e inmediatez en la respuesta para amoldar el proyecto y su desarrollo a las circunstancias específicas del entorno.
En esencia, son aquellos métodos de desarrollo en los cuales tanto las necesidades como las soluciones a estas evolucionan con el pasar del tiempo, a través del trabajo en equipo de grupos multidisciplinarios que se caracterizan por tener cualidades como:
- Desarrollo evolutivo y flexible.
- Autonomía de los equipos.
- Planificación.
- Comunicación.
Ventajas de las metodologías ágiles para las empresas
Existen muchas razones para usar esta metodología y la importancia de este dentro de una compañía. Las principales ventajas son:
- Mejora la calidad: Minimiza los errores en los entregables y mejora la experiencia y la funcionalidad para el cliente.
- Mayor compromiso: Mejora la satisfacción del empleado y genera conciencia de equipo.
- Rapidez: Acorta los ciclos de producción y minimiza los tiempos de reacción y toma de decisiones.
- Aumento de la productividad: Al asignar mejor los recursos, y de forma más dinámica, mejora la producción según las prioridades que tenga la empresa.
Las metodologías ágiles más utilizados en las empresas
Existen diferentes opciones ágiles, pero las alternativas más utilizadas son: Scrum, Programación extrema (XP) y Kanban.
SCRUM
Esta alternativa se caracteriza por ser la “metodología del caos” que se basa en una estructura de desarrollo incremental, es decir, cualquier ciclo de desarrollo del producto y/o servicio se desgrana en “pequeños proyectos” divididos en distintas etapas: análisis, desarrollo y testing. En la etapa de desarrollo encontramos lo que se conoce como interacciones del proceso o Sprint (entregas regulares y parciales del producto final)
Los equipos Scrum están especialmente indicados para proyectos en entornos complejos, donde se necesitan obtener resultados de manera inmediata y donde son fundamentales los siguientes aspectos: la innovación, la productividad, la flexibilidad y la competitividad.
En estos, además, se cuenta con roles específicos y cada uno de ellos es imprescindible para que se lleve a cabo el proceso de forma satisfactoria:
- Stakeholder: es el cliente, su responsabilidad radica en definir los requerimientos, recibir el producto al final de cada iteración y proporcionar el feedback correspondiente.
- Product Owner: es el intermediario de la comunicación entre el cliente y el equipo de desarrollo. Prioriza los requerimientos según sean las necesidades de la solicitud.
- Scrum Master: actúa como facilitador ante todo el equipo de desarrollo y elimina todos aquellos impedimentos que identifique durante el proceso.
- Scrum Team (Equipo de desarrollo): se encarga de desarrollar los casos de uso definidos en los requerimientos. No existe un de jefe de equipo, todos los miembros son responsables.
PROGRAMACIÓN EXTREMA (XP)
Esta metodología se basa en un conjunto de reglas y buenas prácticas para el desarrollo de software en ambientes muy cambiantes con requisitos imprecisos, es por ello que está enfocada en la retroalimentación continua entre el equipo de desarrollo y el cliente. La clave del éxito del Extreme Programming XP es potenciar las relaciones personales a través del trabajo en equipo, fomentando la comunicación y eliminando los tiempos muertos.
Las principales características de la programación extrema son:
- Desarrollo iterativo e incremental.
- Programación en parejas.
- Pruebas unitarias continuas.
- Corrección periódica de errores.
- Integración del equipo de programación con el cliente.
- Simplicidad, propiedad del código compartida y refactorización del código.
KANBAN
Esta estrategia, conocida como ‘Tarjeta Visual”, es muy útil para los responsables de proyectos. Consiste en la elaboración de un cuadro o diagrama en el que se reflejan tres columnas de tareas: pendientes, en proceso o terminadas. Este cuadro debe estar al alcance de todos los miembros del equipo, evitando así la repetición de tareas o la posibilidad de que se olvide alguna de ellas.
La metodología Kanban ayuda a mejorar la productividad y eficiencia del equipo de trabajo. Entre sus principales ventajas están:
- Planificación de tareas
- Mejora en el rendimiento de trabajo del equipo
- Métricas visuales
- Los plazos de entregas son continuos