La inflación cerró el 2022 en 8.46%, la más alta de los últimos 26 años, y apunta, según analistas, a mantenerse por encima del rango meta del Banco Central de Reserva (BCR) aún en el 2023.
Lo cierto es que, a la fecha, la inflación acumulada, considerando el 2021 (año en que la inflación pasó por encima del 3% como dato anual) y el 2022, fue de 15%. Para el presente año, proyecciones como las de Credicorp Capital indican que el registro al cierre del periodo sería de 4%, lo que implicaría un acumulado de alrededor del 20% en tres años.
Si esto se observa como pérdida de poder adquisitivo, desde inicios del 2021 hasta al cierre del 2022, esta es de 13.4%, mientras que al cierre del presente año (con una inflación de 4%) la pérdida se extendería hasta 16.7%. Es decir, en términos reales, un salario “X” al cierre del 2023 tendría 16.7% menos capacidad de compra que en el 2021.
La inflación acumulada (incluyendo la proyectada para este año) pesará en los peruanos a lo largo del 2023, según Credicorp Capital, que la señaló como una de las razones del crecimiento acotado del PBI este año (2.3%, según proyección de ese banco de inversión).
Esta postura se alinea con la de otros analistas, por el impacto que puede haber a través del consumo, y sectores como comercio y servicios, en un contexto donde el empleo formal no tendría gran dinamismo.
LEA TAMBIÉN: Perspectivas económicas para Perú en 2023, según Gobierno, analistas y bancos
LEA TAMBIÉN: Empleo formal privado crecería en 2023 a la mitad que este año
El economista jefe de BBVA Research, Hugo Perea, indicó que el escenario de precios para el 2023 seguirá afectando, y puso énfasis en que si bien se espera que el registro de inflación descienda, no se estima que los precios reviertan.
Asimismo, dijo que esto se da en un marco en el que si bien hay una recuperación del empleo, se observa un deterioro en su calidad, lo que implica una menor capacidad adquisitiva de las personas.
Del mismo modo, señaló que la inflación tiene efectos asimétricos y afecta mucho más a las personas de bajos ingresos, que dirigen más gasto a alimentos.
“Se observa, en el caso de Lima Metropolitana, que los niveles de subempleo se encuentran por encima de sus registros de la pandemia. Eso ha tenido una incidencia en la poca recuperación de los ingresos provenientes de trabajo, y se refleja en más cautela en el gasto, por ejemplo, en bienes durables o entretenimiento, pues deben cubrir alimentos y servicios como luz. Esto no vemos que se va a revertir, por lo menos en el corto plazo, pues la inflación se mantendría alta, sobre todo en el primer trimestre, con todo lo que conlleva para las familias”, sostuvo Perea.
Si se toma como referencia los ingresos del trimestre móvil setiembre-noviembre, los salarios promedio alcanzaron los S/ 1,776, registro que si bien es superior al del mismo periodo del 2020 y 2021, solo está S/ 9 por encima de su nivel del 2019 (prepandemia).
Asimismo, según datos del BCR, el salario real promedio del sector privado (a soles del 2009) es de S/ 1,653, nivel también por debajo del 2021, 2020 y 2019.
El economista senior de Macroconsult, Isaac Foinquinos, señaló que si bien algunos análisis indican una vuelta a la meta o que la inflación se ubique por debajo del 3% al cierre del 2023, en promedio, sería más del 5% este año, lo que implica que aún se sentiría el aumento de precios.
“[La inflación] va a pesar mucho este año, impactando en los salarios reales, que están por debajo en 12% respecto a sus niveles prepandemia en el Perú urbano (contemplando formal e informal), y es poco probable que se recuperen este año. Todo ello configura un impacto a través del gasto de los hogares”, indicó.
Foinquinos destacó que las familias tendrían que recomponer su presupuesto para atender el mayor gasto, sobre todo en alimentos, lo que haría aplazar compras de bienes no esenciales.
Menor soporte para el consumo
Perea mencionó que se espera un menor dinamismo del consumo, en parte porque no se anticipan nuevos retiros de pensiones o impulso afines.
“Si ocurren nuevos retiros, tendrían igual poco impacto, pues ya se sacó gran parte de estos recursos y seguro de aquellas familias que estaban en un situación más complicada. Los que quedan entonces son personas que decidieron, en principio, no retirar y que aún mantienen su empleo. Por el lado de las CTS, aún está liberado para el 2023, pero el saldo se ha mantenido hasta ahora, no quieren retirar. Sin este soporte y con un entorno de crecimiento bajo, en el que no haya mucha generación de empleo, el consumo privado se va a desacelerar”, manifestó.
El economista de Macroconsult dijo que, además de no esperar retiros extraordinarios de los ahorros previsiones, las familias optan por otras medidas para poder cubrir gasto, como la búsqueda de otro empleo.
Según el último reporte de inflación del BCR, en el primer semestre del 2022, la PEA ocupada con dos empleos ascendió a un 20.4% del total. Este valor se sitúa ligeramente por debajo del promedio del 2019 (22.4%). Los trabajadores de los hogares con menos recursos son, en promedio, más propensos a contar con una segunda ocupación. Por su parte, el cuadro también evidencia que los trabajadores dependientes son menos propensos que los independientes a contar con un segundo empleo.
“Hay estrategias para generar más fuentes de ingresos, como el trabajar más horas o conseguir un segundo empleo, sea formal o informal. Otro es utilizar ahorros, en donde entran, bajo el actual contexto, las AFP y CTS. No obstante, estas estrategias se van agotando en el 2023, como pasa con lo ahorros para la jubilación”, indicó Foinquinos.
LEA TAMBIÉN: Economía en riesgo en 2023 por menor crecimiento de socios comerciales
Principales alimentos
Según el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego del Perú (Midagri), la variación de algunos de los principales productos de Lima ha sido marcada, si se considera sus precios minoristas.
Resaltan bienes como el aceite, pollo y huevos, con aumentos de hasta 66% respecto de los promedios del 2020. Asimismo, figuran productos agrícolas como la papa en variedades como yungay, y el camote amarillo (ver tabla).
Datos de inflación y empleo
- La inflación en el 2021 fue de 6.43%. La proyección del BCR para el 2023 es de 3%.
- Proyecciones como las del BBVA Research y Macroconsult indican una inflación de 3.5% y 3% para el 2023.
- En el 2021, el ingreso por la ocupación secundaria representó el 25% del ingreso laboral total de los trabajadores con dos empleos. Esta es la misma participación que mostraba en 2019, según el BCR.
Precisiones sobre el cálculo
- Para el cálculo de los acumulados, se tomó los datos de inflación a 12 meses de los años 2021 y 2022, y la proyección para el 2023 de, en este caso, Credicorp Capital. Se consideró el factor compuesto.
- Para el cálculo de la pérdida de poder adquisitivo se tomó en cuenta el acumulado anterior y el índice de precios al consumidor de los periodos objetivos. Se puede entender bajo el siguiente ejemplo: si se asume que a inicios del 2021 se ganaba “S” y el precio promedio de la canasta de consumo era “P”, entonces se podía comprar S/P canastas. Pero ahora, suponiendo que se sigue ganando S, se puede comprar S/ (1.20P) canastas. Entonces, el poder adquisitivo ha caído en 16.7%