Existen en el país más de 46 mil empresas en la industria cultural, con un crecimiento promedio anual de 5.3% en los diez últimos años y generando más de 625 mil puestos de trabajo, informó el Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (IEDEP) de la Cámara de Comercio de Lima.
En los últimos diez años se han creado 16,901 empresas y entre las regiones con mayor participación destacan Lima que concentra el 70.5% del total, seguida de Arequipa (5.7%) y La Libertad (3.4%).Solo en el 2017, se crearon 3,716 empresas, de las cuales 1,311 se dedican a la publicidad y 1,015 están en telecomunicaciones.
Con menor número se encuentran aquellas dedicadas a actividades teatrales y musicales (2), fabricación de juegos y juguetes (4), actividades de museos y preservación de lugares y edificios (6) y exhibición de films y videocintas (8).
Ley de mecenazgo cultural
Sin embargo, la industria cultural todavía está lejos de compararse con las grandes industrias nacionales en términos macro. Una de las razones es que carece de apoyo estatal, debido a que la cultura es considerada un tema secundario respecto a los principales motores de la economía peruana.
Una alternativa para revertir esta situación es la aprobación del proyecto de Ley de Mecenazgo Cultural, que contempla la participación de capitales privados en iniciativas de índole cultural, según estimó el Vicepresidente del Patronato Peruano de Música, Hernán Lanzara.
Actualmente hay dos iniciativas legislativas de este tipo en el Congreso, la 01544/2016-CR, presentada por el congresista Francesco Petrozzi, y la 01399/2016-CR, de autoría de la legisladora Luciana León.
Esta última propone la exoneración de lo invertido por una persona o empresa en proyectos culturales, en el pago del Impuesto a la Renta (IR). En el caso de una persona natural o jurídica que asocie su nombre con fines de promoción a la donación realizada, se le deducirá el 80% de lo invertido, mientras que las donaciones que no mencionen nombres o marcas tendrán una exoneración del 100% de su inversión en iniciativas de índole cultural, en el momento de pagar su IR.
“La industria cultural peruana puede llegar a ser rentable, como sucede en países vecinos como Brasil, Colombia o Chile, pero para ello en necesario empezar a cerrar la brecha de infraestructura que hay en este ámbito”, dijo Lanzara.
“En el Perú hay un déficit preocupante de espacios para el desarrollo de proyectos de índole artística. Por ejemplo, en Lima solo tenemos alrededor de 20 teatros, mientras que en Buenos Aires hay más de 400”, agregó.
El director adjunto del CCPUCP, Marco Muhletaler, coincidió con Lanzara en la necesidad de la aprobación del citado proyecto de ley, y resaltó la importancia de nuevos rubros incluidos en el sector cultural como las industrias creativas, donde también se incluye a la publicidad y el diseño gráfico.
“Hoy en día se está abriendo un poco más el espectro cultural y artístico, y se está demostrando que la cultura también es una industria muy importante en el Perú, y una que además tiene un retorno económico, un impacto en el PBI, y que le da trabajo a muchas personas”, aseguró.
Asimismo destacó la importancia de promocionar un territorio para la realización de proyectos culturales, como los cinematográficos, y que en el caso peruano es una opción muy interesante que puede acarrear beneficios económicos, tanto directa como indirectamente, como es el caso de turismo y servicios.
Oportunidades
Según precisó el IEDEP-CCL, la industria cultural se vincula con diferentes sectores económicos impulsando actividades como el turismo, editoras de libros, revistas, entre otros.
Por tanto, es importante apostar por este sector donde existen múltiples oportunidades para la generación de empleo y la constitución de negocios, en su mayoría microempresas y pequeñas empresas familiares.
Del universo empresarial dedicado a la cultura, 99.2% son mypes, mientras el 0.8% restante son mediana y gran empresa. Conforme a las actividades, el 40% (18,011 empresas) se dedican a las telecomunicaciones y un 22% a la publicidad (10,142 empresas).
Respecto a la mortalidad de empresas se encuentra un mayor registro en los rubros de telecomunicaciones, publicidad y otras actividades de entretenimiento. Cabe agregar que la mortalidad de empresas supera las mil desde el año 2013 y en los últimos tres años dicho promedio ascendió a 1,975.