SoftBank fue marginada de los planes para un nuevo y lucrativo torneo de fútbol de 24 equipos luego de que ciertos clubes expresaran preocupación por el porcentaje de las ganancias destinado a la empresa japonesa, según personas conocedoras del tema.
La compañía se encaminaba a ser inversionista principal, junto a un consorcio internacional, en una propuesta de US$ 25,000 millones para crear un nuevo Mundial de Clubes y un torneo de selecciones.
Sin embargo, a algunos equipos les preocupaba el porcentaje de las ganancias que la compañía japonesa podría haber obtenido, detallaron las fuentes, que pidieron no revelar su identidad.
Después de escuchar las quejas de los clubes la FIFA, máxima autoridad del fútbol, presentó la semana pasada una nueva versión del torneo, que no mencionó a ningún inversionista.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, comentó que espera celebrar la primera edición del nuevo campeonato en junio y julio del 2021.
Cuando se le preguntó si SoftBank salió de la lista de posibles inversionistas en el nuevo proyecto, un vocero de la FIFA declinó comentar. Tampoco formuló declaraciones un portavoz de la firma japonesa.
SoftBank y FIFA planeaban originalmente crear una nueva compañía para organizar una serie de competiciones de clubes y selecciones, según una persona familiarizada con el proyecto. En virtud de la iniciativa SoftBank y otros inversionistas aportarían US$ 25,000 millones para adquirir una participación minoritaria en el nuevo Mundial de Clubes y otra competencia a nivel de selecciones.
Los clubes interesados en participar en el torneo dejaron claro que no necesitaban fondos por adelantado para hacerlo atractivo, pero estarían preparados para recibir dinero al finalizar la competencia, como es habitual en otros campeonatos, explicó una de las fuentes.
Otra persona informada sobre los planes precisó que si bien SoftBank no iba a tener un papel preponderante en la nueva versión, podría unirse en una etapa posterior.
Es sabido que el fundador de Softbank, Masayoshi Son, mantiene una relación cercana con el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman. Infantino afirmó que excluiría los fondos de riqueza de la iniciativa, de acuerdo con una persona con acceso al proyecto inicial.
La FIFA no ha dado detalles sobre cómo se financiaría el nuevo torneo de clubes, pero la Copa del Mundo se basa en los patrocinios, la publicidad, los derechos de transmisión y los ingresos por cada jornada de partidos.