El sueño de una vida mejor fue lo que llevó a Ronald Abad a dejar su vida en Cajamarca y mudarse a la capital. Cuando recién llegó no tenía mucha experiencia, en su tierra natal se había dedicado principalmente a la agricultura, por lo que aceptó rápidamente un trabajo como asistente de cocina en una cebichería.
Fue ahí donde se inició la historia de Ronald, el hombre detrás del fenómeno de las barras cebicheras que arrasa Lima y otras ciudades.
Abad trabajó como asistente por cuatro años hasta que se enteró que tendría a su primera hija. Las preocupaciones lo invadieron, no sabría si con su sueldo podría proveer para su familia y hasta consideró regresar a Cajamarca donde tendría trabajo seguro.
Pero no fue así, Ronald apostó por sí mismo y dio su primer paso como emprendedor y comenzó a vender cebiche en una carretilla en el distrito de La Victoria, en la esquina de Polvos Azules.
“En un día ganaba lo que hacía en una semana como asistente”, admite Abad. Estaba desde las 5:00 a.m. en el terminal y poco a poco se empezó a hacer conocido en la zona; el pescado se le acababa cada vez más temprano. Tras dos años, la suerte tocó la puerta de Ronald cuando fue seleccionado por Telefónica y Gastón Acurio como el mejor cevichero de carretilla; el premio: un local para su primera barra de cebiche.
De golpe de suerte a negocio sostenible
En un local de 25 metros cuadrados en el distrito de Lince se inauguró el primer local del ‘El Cebiche de Ronald’; la barra tenía una capacidad para 10 personas y el plato estrella era el cebiche carretillero (cebiche de pescado acompañado de chicharrón de pota).
“Honestamente la popularidad del local me tomó por sorpresa”, confiesa Abad. Relata que los asientos se copaban tan rápido que los comensales comían parados en la vereda, desde su carro y hasta el chifa del costado empezó a alquilarle mesas a quienes visitaban la barra.
Buscando ofrecer un mejor servicio, Ronald decidió arriesgarse una segunda vez en su carrera y alquilar un local de mayor capacidad a la vuelta de donde estaba su primera barra.
“Este fue el reto más grande para mí, pasar de un pequeño local con apoyo a pensar en un negocio grande y con una inversión propia”, dice.
Tras pocas semanas de haber abierto el local alcanzó la misma popularidad del original, y el cevichero sabía que tenía un buen producto en sus manos.
Más adelante, en una reunión de amigos surgió la idea de seguir creciendo con el negocio. A partir de ese momento nació la segunda marca del maestro cevichero, ‘Las Barras de Ronald’. A la fecha esta marca ya suma cinco locales, los más grandes están en Miraflores y Chacarilla.
Nuevos proyectos
La meta para este año es cerrar con diez locales de Las Barras de Ronald; los distritos donde más observan potencial son La Molina, Magdalena y San Miguel. El próximo en inaugurar estará en San Borja.
No obstante, Abad confiesa que el siguiente paso de la empresa serán las franquicias. “Hemos tenido muchas ofertas, pero hemos querido ser cautos. Para el 2021 proyectamos lanzarnos al negocio de franquicias y bajo este modelo llegar a distritos periféricos, el interior del país y el extranjero”. Refiere que así como existen Sushi Bars en todo el mundo, considera que el modelo de barras cebicheras puede llegar muy lejos.
Además, la empresa está inaugurando dentro sus principales locales un espacio dedicado exclusivamente al despacho de pedidos para las apps de delivery. “Las ventas delivery hoy ya representan el 25% de nuestra facturación”, anota.
A la fecha, Ronald Abad sigue preparando cebiche dos veces por semana. Comenta –sin revelar la receta- que el secreto de un buen cebiche está en la calidad y frescura de los insumos, una parte del proceso que todavía vigila muy de cerca.
Las Claves
- Cuando se hizo conocido Ronald Abad vendía en su caretilla hasta 200 platos diarios
- Actualmente se encuentran ampliando la barra de Chacarilla, que tendrá una capacidad para 130 personas
- Mensualmente adquiere dos toneladas de pescado para abastecer su local
- Chile y Colombia son los países donde ve más potencial para ingresar con franquicias
- Ticket promedio es de S/29