La Confianza Hotel de Lunahuaná prevé duplicar en los próximos dos a tres años su ocupación y construir otra piscina; además, tiene un proyecto de 10 hectáreas para un nuevo hotel en la Laguna del Sauce en Tarapoto, afirmó Pedro Oré, administrador del hotel.
Señaló que el terreno en la Laguna del Sauce está en proceso de saneamiento y estima que el nuevo hotel estará listo en los próximos cuatro o cinco años.
La Confianza Hotel, que acaba de cumplir diez años, está ubicado en el último anexo de Lunahuaná, llamado Catapalla. Se construyó sobre una bodega de pisco de 1908, con una estructura antigua.
La idea era mantener esta tradición y al mismo tiempo darle un aire moderno. Una particularidad es que el espacio cuenta con obras de arte pintadas en las paredes por artistas nacionales e internacionales que han visitado el hotel.
Protocolos
Oré afirmó que los protocolos aplicados durante los últimos cuatro meses han tenido un impacto en la ocupación del hotel, ya que en setiembre último fue un 69% más alto comparado con el mismo periodo del 2019.
“Antes lo más valorado era el precio, ahora la seguridad y los protocolos han tomado una importancia increíble. Esa es la variable para decidir cuánto pagar y para elegir un lugar”, explicó.
El espacio de 8,000 metros cuadrados tiene piscina, restaurante, bar y 20 habitaciones (6 cabañas matrimoniales, 10 habitaciones matrimoniales y 4 cuádruples). Desde que abrió en julio, el aumento de huéspedes ha sido gradual.
Otro impulso fue la promoción de 3x2, o sea (paga dos noches y la tercera es gratis), y ahora con un 4x3, con el fin de alargar las estadías. Al estar prohibido el uso de autos particulares los domingos, todos los huéspedes se quedan entre jueves y lunes.
En cuanto a los precios, los protocolos han aumentado los gastos del negocio en un 30% pero asegura que sus tarifas solo han sufrido un leve incremento. El rango de precios va entre US$ 120 y US$ 140 la noche por habitación.
Entre las medidas que tomaron estaba que solo las personas que vienen en transporte privado pueden ingresar, tampoco reciben mascotas y se restringe el ingreso de menores de edad y mayores de 65 años.
Los hábitos de comportamiento también han cambiado: “La mayoría viene a tomar distancia y darse un respiro con toda la protección. Todos cumplen con los protocolos, somos muy pesados con ese tema. Pero al final valoran que los estamos cuidando y nos estamos cuidando”.
Turismo receptivo
El hotel no sufre con el poco flujo de turistas extranjeros debido a que Lunahuaná es un destino que recibe pocos visitantes de otros países. Antes recibían un 25% de turistas extranjeros y ahora el 100% es nacional.
El problema principal, sostuvo Oré, es que no hay empresas de transporte que lleguen de manera directa al valle, pese a ser uno de los destinos turísticos más importantes de Lima.