Las aerolíneas Iberia y Air Europa, que operan entre España y América Latina, se han dado un plazo de un mes y medio, hasta finales de enero, para estudiar nuevas vías que faciliten su fusión, después de verse abocadas a romper el acuerdo que alcanzaron hace más de dos años.
En un comunicado de International Airlines Group (IAG) a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, el regulador bursátil en España, la matriz de Iberia detalló este jueves que indemnizará a Globalia, grupo propietario de Air Europa, con 75 millones de euros (unos US$ 85 millones).
Esta cantidad se descontará del precio de compra si finalmente alcanzan un acuerdo para adquirir Air Europa.
Según IAG, ambas partes han cerrado un “acuerdo de intenciones” para evaluar, antes de finales de enero del 2022, otras estructuras “que puedan resultar interesantes para ambas compañías, ofreciendo beneficios similares para sus accionistas, clientes y empleados”.
El comunicado señala que además de la compensación acordada previamente de 40 millones de euros (unos US$ 45 millones) si la operación no se cerraba, IAG pagará a Globalia otros 35 (casi US$ 40 millones), cuantías que irán a reducir el precio de compra futuro y para evitar cualquier litigio en la compra.
El consejero delegado de IAG, Luis Gallego, considera “muy decepcionante” que hayan tenido que rescindir el acuerdo actual, pero argumenta que la decisión tiene sentido debido a las condiciones de mercado y la profunda crisis derivada del COVID-19, según la nota.
Además de que la operación en los términos acordados inicialmente era pesada para Iberia, por la delicada posición financiera de Globalia, con una deuda de unos 700 millones de euros (casi US$ 793 millones).
Gallego asegura que se han comprometido a analizar nuevas alternativas con Globalia “que podrían generar importantes beneficios”.
La operación inicial, cerrada el 4 de noviembre del 2019, establecía que Iberia pagaría 1,000 millones de euros en efectivo (unos US$ 1,127 millones) por la totalidad del capital de Air Europa, pero la pandemia cambió radicalmente la situación del sector y la cifra se rebajó a 500 millones (unos US$ 563.5 millones).
Entretanto, Air Europa recibió una inyección de 475 millones de euros (unos US$ 535 millones) de fondo estatales.
La confirmación de la renuncia llega poco antes del pronunciamiento de la Comisión Europea, previsto para el próximo 4 de enero pero que ahora decae.
Bruselas debía dilucidar si la operación generaba problemas de concurrencia en unas setenta rutas en las que Iberia y Air Europa son las principales o incluso las únicas operadoras.
La fusión afectaría a los servicios que unen Madrid con Estados Unidos o Latinoamérica y a algunas rutas dentro de España o de corto recorrido que trasladan pasajeros a la capital española para continuar desde allí a América.
Iberia y Air Europa compiten en el mercado latinoamericano y, antes de la pandemia, se solapaban en muchos destinos como República Dominicana, Cuba, Panamá, Asunción, Bogotá, Buenos Aires, Miami o Nueva York.