En medio de restricciones por la pandemia y con el impacto de la menor captura de anchoveta a fines del 2019, Austral Group encara este segundo semestre con la expectativa de mejores precios y un pronto inicio de la segunda temporada de pesca.
¿Cómo impactó la pandemia en el primer semestre?
El desafío fue diseñar e implementar protocolos para proteger la salud de los colaboradores. La pesca no paró al estar en el ámbito de alimentos, pero la pandemia nos encontró en pleno mantenimiento de planta y embarcaciones. Trabajamos con el Produce en protocolos para hacer solo lo necesario para poder operar.
Así, ¿cuál fue el resultado?
Logramos cumplir la cuota de captura (en la primera temporada de la zona norte centro) y comprar pesca de terceros, pero las zonas de pesca estuvieron muy al norte, se benefició el puerto de Chicama donde no estamos. Como contamos con barcos refrigerados y de buen tamaño, trasladamos la pesca a nuestra planta de Coishco. La planta de Pisco no la usamos porque había muchos juveniles.
¿Eso trajo mayores costos?
De repente subió el costo de captura un poco, pero no fue tan importante como en los protocolos contra el covid-19 donde invertimos más de un millón y medio de dólares.
¿Cómo cierran el primer semestre del año?
Los resultados arrojan pérdida porque la segunda temporada (en la zona norte-centro) del 2019 fue muy mala. No se capturó más del 38% de cuota y cerró la temporada, había muchas especies juveniles. Como la cuota fue alta y había fiebre porcina en China, los precios estuvieron bajos, fue la tormenta perfecta.
¿Cómo ven este segundo semestre?
Si bien el tercer trimestre veremos un repunte por la venta de la primera temporada, no será tan importante porque la cuota no fue tan grande. Se esperaba 3.5 millones de toneladas pero fue de solo 2.1 millones. Habrá un efecto negativo por los precios, pero permitirá que la mayoría de empresas salgan de estar en rojo.
¿La temporada en la zona sur podría apoyar?
Las capturas en la zona sur son más pequeñas, la cuota es de 450,000 toneladas y el Produce no toma la decisión de abrir ventanas de penetración que nos permitiría capturar esa cuota.
Ahora en el sur se puede pescar, pero hay límite hasta la milla 5 y el recurso se presenta más pegado a la costa. Antes se autorizaba, pero ese régimen se eliminó el 2011 y se han beneficiado los productores del norte de Chile.
¿Se evalúa retomar ese régimen?
Hacemos pedidos constantes. Las capturas de Perú han decrecido y se puede comprobar que cerrar ventanas de penetración no ha tenido efecto positivo en la pesca artesanal, pero sí se han cerrado plantas en el sur. Nosotros seguimos con la planta de Ilo con la esperanza de que esta regulación sea revisada.
¿Cuál es la proyección al cierre del año?
Todo dependerá de la cuota de segunda temporada (en la zona norte-centro) y la fecha de apertura. Si pescamos desde octubre las ventas serían en diciembre, pero si empezamos tarde y la cuota es baja ya las ventas serían para el próximo año.
¿Los precios de la harina de pescado cómo estarían?
Estamos con precios bajos porque estamos cubriendo contratos del año pasado. Ahora los precios van mejorando y el impacto será en las ventas de la segunda temporada.
¿Hay buena demanda en los mercados?
Hemos diversificado nuestros destinos, ya no es solo China al que atendemos con prioridad. Ahora China solo aparece con 44% de nuestras exportaciones, Alemania con 25% y Japón con 19%, Chile con 2%, el mercado interno con 2%, además de Vietnam, España, Corea, Taiwán.
En este contexto, ¿siguen invirtiendo?
Las medidas de distanciamiento hacen que solo nos concentremos en el mantenimiento más importante y en capex tenemos inversiones anuales, que son de reemplazo y se ejecutan en la medida que son necesarios, como reemplazar redes, equipos, automatizando procesos, o reparación y cambio de piezas importantes, son inversiones que la industria hace comúnmente. Por ahora, hemos suspendido la incorporación de nuevas embarcaciones y vamos a ver el próximo año como viene.
Austral espera mayor cuota de jurel
Para Austral Group, el negocio de pesca de consumo humano directo (CHD) permite una mayor diversificación. Y aunque hace unos años salieron del rubro de las conservas, la empresa mantiene su apuesta por el congelado con su planta en Coishco (Áncash). Así, a la captura de caballa, han sumado especies como la pota, calamar y otros, que compran a la pesca artesanal. Sin embargo, la empresa considera importante incrementar la cuota de jurel.
“La caballa nada junto con el jurel, y hemos pedido que eleven la cuota para salir a pescar la caballa sin arriesgarnos a multas por pesca incidental de jurel”, explicó Adriana Giudice.
En tanto, mencionó que aún mantienen la planta de conservas de Pisco hábil, a la expectativa que haya suministro de especies a procesar en algún momento.
Hoja de vida
Profesión: Abogada, por la PUCP.
Otros estudios: Programa de Alta Dirección-PAD, de la UDEP.
Otros cargos: Directora de la Sociedad Nacional de Pesquería, de la IFFO, entre otros.