Los precios mundiales de alimentos cayeron desde casi un récord en medio de las perspectivas de nuevos suministros y los temores de una recesión, lo que podría ofrecer un respiro a los golpeados hogares.
Un índice de Naciones Unidas de los costos mundiales de alimentos cayó un 2.3% el mes pasado. Si bien tomará tiempo para que esta baja se refleje en los supermercados, podría ser una buena noticia para los consumidores que también se ven presionados por los altos precios de todo, desde la energía hasta el combustible para motores y la ropa.
Los precios de los alimentos ya habían subido durante la pandemia y se dispararon aún más después de que el inicio de la guerra en Ucrania obstruyó las exportaciones de cereales del país conocido como el granero de Europa. Pero los precios agrícolas han bajado últimamente a medida que comienzan las cosechas en el Hemisferio Norte y las preocupaciones sobre una desaceleración económica afectan a los productos básicos.
La caída del mes pasado en el indicador de alimentos de la ONU fue el tercer retroceso consecutivo, dijo el viernes la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés). Sin embargo, el índice ha subido un 15% este año y la caída reciente no ha sido tan pronunciada como la baja observada en los futuros de cosechas, lo que indica que los consumidores aún sienten los efectos negativos.
Si bien los granos, los aceites vegetales y el azúcar impulsaron la caída de junio en el índice de alimentos de la ONU, los precios de los lácteos subieron y los costos de la carne alcanzaron un nuevo récord debido a la escasez de pollo en medio de la guerra en Ucrania y los brotes de gripe aviar en algunos países, dijo la FAO.
“En lo que resta del año creo que los precios bajarán levemente, pero no por un margen lo suficientemente significativo como para tener un impacto en los precios minoristas”, dijo el economista de la FAO, Upali Galketi Arachilago, en una entrevista. Los precios de los alimentos podrían bajar si una recesión debilita la demanda de combustible, dijo.
Futuros caen
Los futuros de maíz, trigo y aceite de palma cayeron al menos un 18% el mes pasado ante la preocupación de que una desaceleración económica afectará la demanda de productos básicos.
Por el lado de la oferta, la disponibilidad de trigo debería subir con las cosechas en curso en Estados Unidos y Europa, mientras que los agricultores estadounidenses están sembrando más maíz que lo esperado. El gigante de aceite de palma Indonesia está aumentando las exportaciones luego de una prohibición reciente.
Aún así, cualquier caída en los precios de los cultivos puede ofrecer un alivio limitado por ahora. El índice de la ONU monitorea los precios de exportación de las materias primas y excluye los márgenes comerciales.