Contextos de emergencia: desde subsidios del gobierno hasta una inclusión digital de las economías locales
Se acerca el fin de año y los pronósticos de las organizaciones meteorológicas advierten que el fenómeno del Niño costero, tendrá un impacto fuerte en los meses de verano en distintas ciudades del país. Los fenómenos meteorológicos son constantes en el Perú, desde oleadas de frío hasta ciclones fuertes como el último llamado Yaku, y ni qué decir de otros contextos de emergencias como lo fue el covid-19, o como el gran sismo que advierten especialistas se podría dar tarde o temprano en la ciudad de Lima, debido al silencio sísmico de hace muchos años.
Para estos contextos de emergencia, se necesita llevar una planificación a todo nivel. Y un aspecto que siempre es relevante, es cómo hacer para que las personas puedan recibir ayuda monetaria de parte del Estado en tiempos de crisis. La asistencia financiera rápida y eficaz, es clave. Y en ese sentido, una herramienta esencial es el uso de pagos digitales a beneficiarios como ayuda gubernamental o en iniciativas privadas.
Por ejemplo, puede suceder que las carreteras se bloqueen y no sea posible abastecer de dinero en efectivo oportunamente los cajeros automáticos. Esto afectaría gravemente a un gran segmento poblacional que todavía depende de la posibilidad de realizar pagos y movimientos en efectivo. Y si a ello le sumamos que no todos tienen acceso de por sí a los cajeros automáticos o bancos, y en donde la bancarización incluso no es común, ¿cómo hacemos para entregar montos a beneficiarios de manera rápida y eficaz?
Dado el crecimiento del uso de smartphones e internet en el país, los pagos digitales son una opción viable para que las personas puedan tener la oportunidad de recibir ayuda financiera por parte del gobierno, una solución práctica y relevante en un contexto adverso.
En el contexto de la pandemia, se desarrolló “cuenta DNI” del Banco de la Nación. Esta cuenta permitió a miles de peruanos recibir subsidios del Estado, y se mantiene vigente hasta hoy facilitando que más personas puedan abrir su cuenta de manera digital sin necesidad de acercarse a una agencia física, tan solo colocando su documento nacional de identidad (DNI) y un correo electrónico personal, en una web y siguiendo sencillos pasos. Esta cuenta permite retirar dinero de cajeros, así como afiliarla a una billetera digital, la cual permite realizar mayores operaciones sin necesidad del efectivo. Y si a ello le sumamos los alcances regulatorios que han permitido mayor integración a través de la interoperabilidad entre los diferentes actores del sistema, tenemos una potente acción en la bancarización de más ciudadanos.
Sin embargo, ante realidades como esta, conviene preguntarse cómo maximizamos estos esfuerzos y llevamos el país al siguiente nivel de desarrollo, impactando en la digitalización y generando mayores beneficios para las personas. Sabemos que el marco regulatorio está dando herramientas, pero para aprovecharlas se requiere trabajar en alianzas con actores tanto públicos como privados y desarrollar proyectos en economías locales enfocados en el uso de herramientas digitales, promoviendo especialmente los servicios financieros innovadores y adaptados a la realidad de diferentes zonas del país.
Un buen ejemplo es el piloto que realizaron Mastercard, Fundación Capital y Neumann Kaffee Gruppe (NKG), a través de su subsidiaria colombiana el grupo SKN Caribecafé Ltd, quienes lograron durante el año 2019 y 2020 empezar a adaptar digitalmente a 86 caficultores rurales de Pitalito, Huila, mediante “Café Paga”, un entrenamiento en el uso cotidiano de productos financieros, identificando y abordando las oportunidades en la cadena de abastecimiento del agro colombiano en relación a la digitalización financiera (1)
En el Perú, el agro es uno de los sectores más golpeados por los fenómenos climatológicos, tanto por las interrupciones de las carreteras como por las lluvias que pudiesen destruir sembríos. También se observa una gran dependencia de algunos productos importados para sus cosechas, que a veces tienen subidas de precio considerables. Por lo que es relevante tener en especial consideración a este sector para desarrollar una inclusión digital de economías locales.
A continuación, algunos puntos (2) a tomar en cuenta en este proceso que son aplicables a diversos sectores, sobretodo los que son incentivos en manos de obra como la agricultura y la construcción:
1. Al contar con cuenta digital los usuarios ya están empezando a comprender y a confiar en el sistema. Por lo cual ya están listos para el siguiente paso, utilizar las funciones básicas digitales de su cuenta (transferencias persona a persona, compras con tarjeta, pago de cuentas, recargas, etc) iniciando así el desplazamiento del uso del efectivo. Por ejemplo, esto permitiría a los usuarios reducir costos y tiempos de traslados para hacer compras de insumos, así como el pago de servicios básicos y tributos, los cuales están habilitados para ser pagados vía online.
2. Cuando ya empezaron a desplazar el efectivo y usar lo digital para diferentes funciones, el reto está en consolidar estos avances para que los beneficiarios se conviertan en “verdaderos creyentes de la inclusión digital” e inicien préstamos personales, adquirir seguros, tarjetas de crédito o realizar inversiones. Incluso puedan comparar productos de diferentes instituciones y elegir lo más conveniente. De esta manera, se reduciría la brecha de lo urbano-rural, habilitando el uso real de servicios del día a día.
3. Este gran segundo paso, no sería posible sin reconceptualizar la educación financiera. Esto es lograr asesoramiento e interacción en tiempo real; priorizando la personalización de los productos, brindando acceso a créditos relevantes para los usuarios, y demostrando cómo estas herramientas permiten que cumplan con sus metas. Así, crece la confianza hacia lo digital y se da una “educación invisible”.
Este enfoque de integración de servicios digitales financieros en el contexto actual será un factor relevante para el crecimiento productivo de los sectores de diferentes economías locales. Sin duda, es clave aprovechar la coyuntura de integración generada por el aumento de las opciones de la interoperabilidad impulsada por los diferentes actores del sistema, y teniendo en cuenta lo avanzado a través de los subsidios digitales que el gobierno realiza en contextos de emergencia, éstos se deben convertir en la puerta de entrada para tener un impacto relevante en las economías locales.
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1. Para mayor información sobre el proyecto: https://www.mastercard.com/news/latin-america/es/sala-de-prensa/comunicados-de-prensa/pr-es/2020/diciembre/las-tres-lecciones-de-mastercard-para-la-expansion-de-los-pagos-digitales-en-comunidades-rurales-de-colombia
2. Ideas adaptadas del Estudio: “Estado de la inclusión financiera después del COVID-19 en Latinoamérica y el Caribe: Nuevas oportunidades para el ecosistema de pagos”, desarrollado por Americas Market Intelligence en mayo 2023, y de los resultados del proyecto mencionado “Café Paga”.